Un equipo de investigación de la Universidad de Santiago, con la colaboración de la unidad de buceo de la Armada y de la empresa de arqueología Argos, intenta localizar desde ayer en la zona de Cariño, en la ría, el pecio del mayor navío de la Armada Invencible, la “Ragazzona”. Con la esperanza de hallar restos importantes, como cañones, anclas o cerámica, empezaron el trabajo de campo estos investigadores, que reivindican la importancia e interés histórico de este naufragio. Recuperar la memoria de aquel gran fracaso de Felipe II es el objetivo de un proyecto que tiene mucho de romántico.
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