OmniPhantasmic, del fotógrafo Neil Craver, es una muestra que reúne cuerpos desnudos en ambientes submarinos.
Fotografías omnipotentes son una constante en el portafolio del talentoso Neil Craver (31, radicado en Winston-Salem, Carolina del Norte.
Inició su carrera como escultor figurativo y pintor abstracto, con un creciente interés por los efectos psicofísicos del croma, sus creaciones emergen como una suerte de exploración interior, una manera de rencontrarse consigo mismo articulando su sentir y sus pensamientos.
Muestra de tan interesante fórmula es su más reciente serie Omni-Phantasmic ganadora del premio Pollux en la categoría de desnudo. El proyecto -destinado a ser consumido por sus emociones- persigue el desarrollo de una cromática y estética única empleando el poder del agua para generar una composición subliminal.
El resultado es un lenguaje simbólico que revela el nexo entre un estado consciente y subconsciente, entre la caída y el vuelo, la vida y la muerte como aspectos no tangibles pero sumamente inspiradores para el fotógrafo.