entrevista.
Xavier Pastor. Director de Oceana Europa
´La pesca de arrastre tendría que ser drásticamente reducida en Balears´
"El peor espectáculo que he presenciado en el mar es ver agonizando a una familia de cachalotes en una red a la deriva".
"Si no se respetan las cuotas de captura de atún, la especie podría estar extinguida en el Mediterráneo en dos o tres temporadas" I. OLAIZOLA. PALMA. La vida de Xavier Pastor siempre ha estado ligada al mar. Persigue las prácticas ilegales en la pesca del atún, denuncia la actividad de los arrastreros y el más penoso espectáculo que ha presenciado en sus múltiples singladuras por todos los mares del mundo ha sido los efectos devastadores de las ilegales redes a la deriva. El 23 de mayo inició una campaña de seis meses a bordo del MarViva Med para denunciar las actividades de pesca ilegal y determinar qué áreas marinas del Mediterráneo deben ser protegidas.
-Usted denuncia la actividad de atuneros franceses e italianos en el Mediterráneo pero, ¿qué pasa con los atuneros españoles?
-De España se dice que sólo tiene seis barcos que se dedican a esta actividad y que causa menos impacto. Lo que pasa es que casi todas las embarcaciones de Francia, Italia y Turquía trabajan para una empresa española llamada Fuentes que está radicada en Cartagena y que es la que mueve todos los hilos de la pesca del atún en el Mediterráneo. Entre un 60% y un 70% de las capturas del Mediterráneo están controladas por estos dos hermanos que tienen una macroempresa dedicada a la pesca, engorde y comercialización del atún.
-¿Qué puede hacer un ciudadano normal para intentar acabar con estas campañas que amenazan la supervivencia de una especie? ¿Negarse a consumir atún?
-La actitud del consumidor siempre es interesante porque afecta a la actividad económica pero normalmente no basta, ya que raramente los consumidores que secundan el boicot sobrepasan el diez por ciento del total. Lo que hace falta es la intervención de los gobiernos. Sus propios científicos les dicen que sólo se pueden pescar quince mil toneladas, ellos aumentan la cuota hasta las treinta mil toneladas y los barcos capturan entre cincuenta y sesenta mil toneladas. En definitiva, se cuatriplican las capturas anuales aconsejadas por los científicos para todo el Mediterráneo. Habría además que cerrar zonas como Balears y crear allí un santuario para la reproducción de la especie. Si no se respetan las capturas que aconsejan los científicos, en dos o tres temporadas podríamos estar hablando de la extinción del atún en el Mediterráneo.
-¿Qué artes usadas todavía son las más perjudiciales para la preservación de los recursos pesqueros?
- Sin lugar a dudas, las redes a la deriva. Aquí en el Mediterráneo oscilan entre los diez y veinte kilómetros de longitud y unos treinta metros de altura. Es una cortina que se deja a la corriente y está pensada para pescar pez espada o atún pero atrapa todo lo que encuentra. Contrariamente a lo que la gente piensa, la malla no es muy tupida, tiene entre cuarenta y cincuenta centímetros de anchura y esto es lo que la hace tan letal. Los peces grandes y los mamíferos se quedan enganchados en ella por las branquias o por una aleta. Si la trama fuera más pequeña rebotarían en ella y podrían sortearla.
-El ´MarViva Med´ está equipado con un robot que puede sumergirse a quinientos metros para documentar la riqueza de fondos marinos que más tarde recomendáreis proteger ¿Qué zonas de Balears considera que hay que preservar?
-En Balears ya hemos cubierto toda la zona del este y el sur del archipiélago, pero la queremos documentar más. Pero ya podemos recomendar una ampliación del parque de Cabrera, de los fondos de Emile Baudot, algunas otras montañas submarinas que hay entre Mallorca y Eivissa como las Olivas o Ausías March, otra zona de volcanes submarinos en la misma área, ampliar el parque de ses Salines, proteger el cañón de Menorca... Tenemos una serie de propuestas que vamos a documentar mejor. Lo que nos falta cubrir es la Serra Nord en Mallorca y la zona norte de Menorca y Eivissa. En campañas anteriores no lo hemos podido hacer por la mala mar pero ahora, con la envergadura del MarViva Med, lo haremos.
-Ha citado varias zonas en mar abierto. ¿Es consciente de la dificultad que entraña su protección?
-Sí, la vigilancia es difícil, pero tendremos que ir moviéndonos en esta dirección. A todas estas zonas pelágicas en alta mar nadie les ha hecho caso en ninguna parte del mundo, pero ya todos los científicos están de acuerdo en que estas montañas submarinas son como oasis de vida donde se concentran y reproducen las especies de peces, donde hay unos altísimos índices de biodiversidad porque se producen unas corrientes ascendentes desde el fondo del mar que traen consigo los nutrientes que sirven de alimento en la capa más superficial a numerosas especies de pescados, mamíferos marinos, tortugas e incluso para las aves. Y es preciso empezar a pensar en proteger grandes áreas pelágicas. Tampoco es tan difícil, tan sólo es necesario disponer de una o dos patrulleras para su vigilancia.
-¿Cómo se puede conciliar la protección del mar con la actividad pesquera?
-Realmente es al contrario. Si no se crean zonas protegidas y áreas reservadas va a ser esa falta de protección la que va a acabar con la pesca, que es lo que está ocurriendo hoy en día. Toda la crisis pesquera no es más que un reflejo de la crisis de los recursos. Han sobrepescado todos los caladeros y se han encontrado con que no hay pescado y encima les suben el precio del combustible. Hay demasiados barcos para el pescado que hay en el mar. Hay una problemática de sobreexplotación. Y las reservas marinas son como criaderos de pescado y a su alrededor se producen unas capturas extraordinariamente altas. Y un ejemplo de esto es la reserva de Menorca, defendida con uñas y dientes por los pescadores de la zona porque les interesa mucho. En definitiva, la preservación de áreas marinas es lo que salvará la actividad pesquera.
-¿Qué modalidad de pesca que se practica en Balears es más nociva?
-Sin duda, el arrastre de fondo porque captura indiscriminadamente cualquier animal, organismo o planta a su paso y atrapa ejemplares más pequeños de los permitidos. Es una pesca muy agresiva y muy ineficaz, porque consume una gran cantidad de combustible. Además, la gran mayoría de los arrastreros usan motores más potentes de los quinientos caballos permitidos por ley. Desafiaríamos a cualquier barco de arrastre de las islas a que demostrara que su embarcación sólo tiene quinientos caballos. Por eso pedimos que, con las ayudas que hagan falta procedentes de Europa, Gobierno central o autonómico, se fueran eliminando. Desde luego de la plataforma continental. A menos de doscientos metros no debería pescar ningún barco de arrastre y habría que determinar en qué zona del talud podrían mantenerse una serie de embarcaciones dedicadas a la gamba. En definitiva, el arrastre tiene que ser drásticamente reducido en Balears y en todo el Mediterráneo.
-¿Y la pesca de langosta en Menorca?
-Nos gustaría que cumplieran la ley en relación a la longitud de los trasmallos que usan, que es mucho mayor de la permitida, y que mantuvieran las redes menos tiempo en el agua porque sobreexplotan la langosta y provocan capturas accidentales.
-¿Cuál es el espectáculo más penoso que ha contemplado en el mar?
-Las redes a la deriva, la mortalidad indiscriminada que provocan. He visto situaciones conmovedoras con los cachalotes, que van en grandes grupos muy cohesionados y, cuando uno de sus miembros queda atrapado en estas redes los demás no huyen, se quedan al lado suyo y le intentan ayudar y lo único que consiguen es quedar ellos también enredados. Toda la familia, grupos de cinco o seis grandes animales y sus crías que mueren después de grandes sufrimientos porque pueden respirar durante un tiempo, sacar el opérculo para hacerlo, y tardan mucho en morir. O ver un arte de arrastre pasar por una pradera de posidonia arrasándolo todo a su paso también es muy impresionante.
-¿Y las pruebas nucleares del atolón de Mururoa?
-No fueron tan espectaculares. Cuando estábamos allí notamos tan sólo un temblor ya que las detonaciones fueron subterráneas. No presenciamos ningún hongo nuclear ni nada parecido. Lo que no quiere decir de ninguna manera que estas pruebas nucleares no sean nocivas. La radiación se filtra por las grietas de las cavidades rocosas y durará en esa zona durante siglos.