A fin de descargar la presión sobre zonas arrecifales altamente visitadas, la Conanp impulsa como proyecto la colocación, operación y mantenimiento de nuevos hábitats artificiales en 17 puntos ubicados dentro del Parque Marino Nacional Costa Occidental Isla Mujeres, Punta Cancún, Punta Nizuc, y en el Parque Nacional Isla Contoy.



CANCÚN, MX.- A fin de descargar la presión sobre zonas arrecifales altamente visitadas, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) impulsa como proyecto la colocación, operación y mantenimiento de nuevos hábitats artificiales en 17 puntos ubicados dentro del Parque Marino Nacional Costa Occidental Isla Mujeres, Punta Cancún, Punta Nizuc, y en el Parque Nacional Isla Contoy, con la finalidad de ofrece nuevos atractivos a los turistas.

De aprobarse la iniciativa, en actual evaluación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), se daría entrada al proyecto del Museo Escultórico Submarino que pretende la colocación de un promedio de 200 piezas de arte como nuevo atractivo turístico de Cancún. El museo es un proyecto que se coordina conjuntamente con Asociados Náuticos y sólo resta la autorización de impacto ambiental para iniciar con la instalación de las esculturas, pues se cuenta ya con los recursos y el escultor ha comenzado a elaborar las piezas.
Los otros hábitats artificiales contemplados consisten en los reef balls y los layer cakes, que son estructuras hechas de cemento y que han sido colocados ya dentro de algunas zonas coralinas para fungir como arrecifes artificiales con bastante éxito, fomentando además la agregación de peces.
También están los payaos o estructuras flotantes, hechos de distintos materiales y que se colocan a media agua o en la superficie para atraer peces, con diferentes propósitos.
El cuarto tipo de estructuras tendría diferentes diseños y materiales, tales como el cemento, la madera y metales como el bronce, de acuerdo con la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), ingresada a evaluación el 29 de julio pasado y consultada por El Periódico.
Se busca que cualquier estructura o material a sumergir dentro de los polígonos debe ser inocuo para el medio marino, que los materiales usados no se disuelvan o se integren al sustrato marino, columna de agua o reacciones con algún componente del agua marina, y tampoco que se encuentren a la deriva y representen un peligro para la navegación marítima.
La instalación de los diferentes tipos de hábitats artificiales (HA) busca descargar el impacto que las actividades humanas generan directamente en las unidades arrecifales, además de re-direccionar a los turistas que visitan la zona hacia sitios alternativos en donde puedan disfrutar y observar la presencia de peces, invertebrados marinos, los diseños de las estructuras y los efectos del crecimiento de flora y fauna marina en ellos, dando un descanso a las unidades coralinas naturales.
Entre otros objetivos, se cita el evitar que los turistas que se inician en cursos de buceo autónomo y que aún se consideran inexpertos ingresen en donde se encuentran las unidades arrecifales naturales, fragmentando o impactando especies de corales pétreos y blandos.
Asimismo, que algunos de los sitios en donde se coloquen los hábitats artificiales sean lugares seguros para los turistas durante los días en que se presenten condiciones hidrometeorológicas desfavorables.
El proyecto está pensado a 10 años y diferentes etapas, ya que su operación abarcará más de 50 años.