En Brasil ha sido desarrollada una tecnología que determina el nivel de contaminación marina por mercurio y otros metales pesados a través del delfín gris.
Según informa la Fundación de Apoyo a la Investigación en el Estado de Río de Janeiro (Faperj), los científicos comenzaron a emplear el cetáceo Sotalia quianensis" (delfín gris o costero) como bioindicador cuando descubrieron que el animal acumulaba mercurio en sus tejidos.

El proyecto, financiado en parte por la Faperj, midió las concentraciones de mercurio en diferentes zonas de la costa brasileña, como el estuario del río Amazonas y la costa norte del estado de Río de Janeiro.

Las muestras fueron tomados de delfines cuyos cuerpos habían llegado a las playas en el proyecto de Río de Janeiro, y de animales que habían quedado atrapados en redes de pescadores en el caso del Amazonas. Las muestras tomadas de 20 ejemplares en el litoral de Río indicaron que el contenido de mercurio se hallaba entre los 0,2 y 1,66 microgramos por gramo de músculo; mientras que las 27 muestras del estuario de Amazonas presentaban un contenido de mercurio de entre 0,07 y 0,79 microgramos por gramo.

Esta tecnología fue desarrollada por el biólogo Jailson Fulgencio de Moura, investigador de la estatal Escuela Nacional de Salud Pública (Ensp). Eligió esta especie por su característica de almacenaje de sustancias contaminantes en su organismo, superior al de otras especies, y por su tendencia a permanecer en la misma región costera, lo que facilita su seguimiento.

Los resultados obtenidos en el proyecto no son tan elevados como los de algunos países de Asia y Europa.