....¿que estoy haciendo aqui,?, ¿quien me manda meterme en este lio?, ....que será de mis hijos si me pasa algo, .....seguramente estas frases, especialmente la primera, resonarán a más de uno, como frases que en algún momento de sus buceos resonaron en su mente , acompañadas de un intenso deseo de volver a casa o de finalizar la inmersión.
He encontrado este tipo de situaciones en diferentes contextos, contextos de viajes vida a bordo, donde establecemos un compromiso con el buceo de una semana sin posibilidad salvo urgencia de volver a tierra, en buceos que sobrepasan nuestra posibilidades o nos exigen esfuerzo de superación , aunque estén integrados en cursos de formación avanzada o técnica, en personas que empiezan a bucear, o simplemente uno de aquellos dias malos que todos tenemos.
Estos pensamientos suelen ir acompañados de malestar , incomodidad fisica, inquietud y cierta sensación de "extrañeza", como que te dieras cuenta de que te estás complicando la vida sin darte cuenta, en algo que te supera o en realidad no te apetece; todo ello en general ,pueden considerarse manifestaciones emocionales, cognitivas o somáticas de la ansiedad.
Una vez finaliza el episodio, podemos trivializarlo, atribuirlo a la narcosis, sea la profundidad que sea, o encontrar cualquier excusa "razonable" que nos ahorre el malestar de enfrentarnos a la situación, o magnificarlo y considerar que el buceo no es para nosotros o lo que es peor, es algo para lo que no "servimos" y abandonar la actividad.
Lo primero que deberiamos pensar , es que cuando nos ocurre algo de este tipo, es algo a lo que debemos prestar atención, pero que prestarle atención no necesariamente nos debe llevar a una situación negativa para al buceo, sinó que más al contrario entenderlo nos puede fortalecer y ayudar a superar el episodio que puede quedar en algo anecdótico.
No dar ese paso puede llevar a dos actitudes extremas.Negar la relevancia y seguir como si no pasara nada, con el consiguiente riesgo; o bien generar un muro hacia el buceo que nos impida seguir buceando temporal o permanentemente , cuando en relalidad la inmersión solo ha actuado de desdencadenante o a lo sumo de marco de referencia donde se ha expresado un conflicto o situación emocional , previamente establecida.
Ya he comentado en alguna ocasión, que los cambios perceptuales y cognitivos que ocurren el buceo (cierta deprivación sensorial, flotabilidad neutra, impacto del nitrogeno en el nivel de alerta y de conciencia.......pueden facilitar la emergencia de emociones y sentimientos poco accesibles a la conciencia en otras condiciones, que si son de caracter ansisoso-depresivo, pueden facilitar la aparición de este tipo de situaciones por otra parte en muchas ocasiones son "benignas" y de fácil resolución.
Recuerdo el caso de una chica que me tocó de compañera en una primera inmersión en un viaje.En la inmersión se mostró inquieta, pero con el contacto físico directo (la mano/ o la mirada), en momentos puntuales pudo finalizar el buceo sin excesivos problemas.En superficie me comentó que durante la inmersión además, sentia intensos deseos de llorar y pensaba en su hijo de corta edad.
Estuvimos charlando y pudo darse cuenta que era la primera vez que se separaba unos dias de su hijo y eso le producia mucha tristeza , pero que no era incompatible con la ilusión que le hacia justamente poder recuperar ese margen de libertad , que a veces los crios pequeños nos limitan, en una actividad ,el buceo ,de la cual disfrutaba y habia cesado por algún tiempo.
Dado que la criatura estaba perfectamente atendida , pudo comprender que la cuestión era más de base emocional, y lo más importante , no estableció un vínculo directo entre su malestar y el buceo, sinó con la causa real que lo originó, que no era otra que la separación temporal de su hijo, y pudo asi tomar la decisión que consideró más oportuna.
En las siguientes inmersiones no se produjo ninguna circunstancia reseñable.
Es solo un ejemplo de tantos que pueden acontecer, tantos como personas hay, pero sirve como ilustración de la cuestión tratada aqui.
Saludos