Submarinistas y pescadores recreativos denuncian ante la UE el deterioro de Islas Atlánticas
(La Voz de Galicia) El Club Subacuático Bahía de Vigo y la Federación Gallega de Pesca Recreativa han puesto tres denuncias, respectivamente, en la Agencia Europea de Medio Ambiente, en la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea y en la Agencia Europea de Seguridad Marítima contra el Parque Nacional de las Illas Atlánticas por la situación de deterioro que, a su juicio, éste sufre.
Las dos asociaciones gallegas también han pedido la presencia de inspectores de la Comisión Europea para verificar todas sus denuncias, y anuncian que reclamarán la intervención del valedor do pobo y los defensores del pueblo de España y la Unión Europea.

El asesor jurídico de estas asociaciones explicó ayer que el parque nacional sufre una situación de interinidad a consecuencia de que no ha elaborado su plan de gestión de usos. «Esta ausencia, que debería haber sido realizada por ley hace cuatro años, produce graves daños, tanto a particulares como a asociaciones, visitantes, turismo y, sobre todo, al ecosistema de la zona», afirmó Javier Sánchez Agustín.

El abogado de las asociaciones denunciantes explicó que, tras realizar diversas gestiones en 23 organismos españoles, pueden concluir que el parque nacional carece de estudios sobre su flora y su fauna marina, sobre la explotación de recursos pesqueros, sobre el número de embarcaciones que faenan en la zona, sobre planes de emergencia y seguridad, o sobre el número de visitantes que pueden soportar las islas.

Pesca recreativa y fondeo

Las asociaciones denunciantes comenzaron, tras la declaración de las islas como parque nacional, una batalla por reclamar sus derechos de uso en estas aguas. En la actualidad, está prohibida la pesca recreativa en la zona, así como muy limitado la navegación y el fondeo en la zona. Al mismo tiempo, la flota artesanal de las cofradías cercanas sigue faenando con permiso en aguas del Parque Nacional Illas Atlánticas.

«Nosotros somos favorables a que haya una convivencia de todos, creemos que es posible», señaló el abogado, quien recordó ayer que en el parque se usan artes como de arrastre como el can.

Asimismo, los denunciantes afirman que las autoridades del parque no han hecho nada por limpiar los fondos marinos, y aseguran que están llenos de artes de pesca abandonadas que producen mucha mortandad de especies.

La recogida de residuos, la seguridad o incluso los servicios mínimos son puestos en tela de juicio por las asociaciones denunciantes.

El abogado de estos colectivos afirmó en este sentido que las consecuencias de las denuncias en la Unión Europea podrían ser graves.

«Si los inspectores confirman nuestras denuncias, el parque podría perder la condición de zona especial de protección de aves, o la condición de lugar de importancia comunitaria ya que está integrado el parque en la Red Natura 2000», concluyó Javier Sánchez Agustín.