Cinco especies de tiburón y otras dos de mantarraya quedarán protegidas desde el próximo 14 de septiembre por la Convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestres (CITES, por sus siglas en inglés) de Naciones Unidas, según ha informado la red de vigilancia de la vida salvaje TRAFFIC. Se trata del tiburón martillo común (Sphyrna lewini), el tiburón martillo gigante (Sphyrna mokarran), el tiburón martillo liso (Sphyrna zygaen), el tiburón oceánico de puntas blancas (Carcharinus longimanus), el tiburón cailón o marrajo del norte (Lamna nasus), así como varias especies de mantarraya.
Según la organización, todas estas especies son muy valiosas desde el punto de vista comercial y por ello están sometidas a la sobrepesca. En concreto, todos los tiburones anteriormente citados son capturados por sus aletas, utilizadas como ingrediente en la gastronomía de territorios asiáticos como Hong Kong; en cambio, el interés comercial por el marrajo del norte radica en su carne, consumida en la Unión Europea. En el caso de las mantarrayas, sus branquias son muy valoradas como tónico para la salud en el sur de China.
Por ello, su introducción dentro del convenio CITES implicará una regulación "estricta" de los intercambios comerciales, con el objetivo de garantizar que los países que las capturan y exportan solo puedan hacerlo de forma legal y cuando ésto no amenace la supervivencia de las poblaciones de animales.
"TRAFFIC mantiene un compromiso absoluto para asegurar que las medidas CITES dirigidas a estas especies de tiburón y mantarraya se implementan con éxito; en este sentido, la cooperación internacional es esencial. Nos jugamos mucho con esto: recuperar las poblaciones de tiburón a nivel mundial es crucial para la salud de nuestros océanos", ha subrayado el director del Programa de Comercio Pesquero de TRAFFIC, Glenn Sant.
La decisión de Naciones Unidas llega tras un período de 18 meses durante los que los países implicados en la explotación de estas especies han tratado de adaptar el sector pesquero a los requisitos fijados por la Convención. En este sentido, han contado con la colaboración del Secretariado de CITES, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), así como la organización WWF y la propia TRAFFIC.
La entidad explica que una de las líneas de trabajo ha consistido en el desarrollo, con el apoyo del Gobierno alemán, de un marco de actuación para que el sector pesquero pueda calcular cuáles son los niveles de capturas que las poblaciones de tiburón pueden soportar. Asimismo, se ha impulsado junto con el Gobierno inglés 'M-risk', un método para cuantificar el riesgo de sobreexplotación como consecuencia de una gestión "pobre".

http://www.europapress.es/epsocial/n...912124016.html