Es el destino ideal para los turistas que buscan paz y descanso en medio de un ambiente natural.



El agua es cristalina, tibia y reposada, y sus colores se mueven entre el verde y el azul. Es el mar que rodea a Isla Múcura, en medio del archipiélago de San Bernardo, en el departamento de Bolívar. (Vea todas las imágenes del paradisiaco destino).

Allí, en un ambiente inhóspito, queda el hotel Punta Faro, un remanso de paz para los turistas que anhelan pasar unos días de descanso en comunión con la naturaleza. Si lo que busca es rumba y mucho movimiento, este no es el destino indicado.
"El paraíso queda aquí. Si quieren desconectarse de todo, tienen que venir a este lugar", afirma la ejecutiva bogotana Susana Villamizar.

Isla Múcura hace parte del Parque Nacional Natural Corales del Rosario y, además del hotel, cuenta con playas públicas y espesos manglares aptos para caminatas ecológicas.

A cinco minutos en lancha, en la isla vecina de Tintipán, queda una de las zonas coralinas más bellas y apreciadas del país. Allí, después de una instrucción de una hora y media, los visitantes pueden disfrutar de la inolvidable experiencia del buceo.
Se puede llegar vía Cartagena o vía Tolú (Sucre). La buena atención de los nativos, la sabrosa gastronomía y el ambiente paradisíaco son los principales atractivos de este rincón del Caribe colombiano.

Relax total en el Caribe colombiano

"Bienvenido al fin del afán". Ese es el mensaje que reza en un letrero ubicado en la entrada del hotel Punta Faro, en Isla Múcura. A pocos metros reposan las esculturas de bronce de un par de ancianos, sentados sobre una silla de madera, con la mirada fija -como hechizada- en dirección hacia el océano infinito.

Múcura es una de las 10 islas que conforman el archipiélago de San Bernardo, en el departamento de Bolívar, al norte del golfo de Morrosquillo, y hace parte del Parque Nacional Natural Corales del Rosario. Y el hotel Punta Faro ocupa 9 de sus 23 hectáreas.

Al desembarcar, el primer antojo es sentarse al lado del par de viejos bronceados a contemplar el horizonte: un mar reposado de agua cristalina y arena blanca.

"Este es un lugar que aquieta, ideal para entregarse al arte del ocio", cuenta Óscar Alzate, un antioqueño que se retiró de la industria inmobiliaria para gerenciar este hotel, que llama la atención por su diseño campestre y amigable con los ecosistemas: combina la madera entrelazada con palmas y mangles.

La playa es tranquila y silenciosa. No hay mucha gente y cada quien está en lo suyo: algunos toman el sol y se refrescan con un coctel, otros leen un libro y unos más disfrutan del agua tibia y de escaso oleaje. Los niños arman castillos de arena, juegan tenis o dan un paseo en kayac.

"El sitio es muy tranquilo, bello y relajante. Yo armé un rompecabezas de 2.000 piezas, mi esposa jugó tenis y mis hijas consiguieron amigos", dijo el viajero Alfonso Monsalve.

Es hora del almuerzo y todos se congregan en el restaurante Alcatraz: un bufé lleno de frescos frutos del mar: pescados como pargo, sierra o mero; langostinos, pulpos y caracoles.

Pero si el huésped lo prefiere puede pedir algo más liviano o darse una pasada por el puesto de Los Fritos de Olivia, una nativa famosa por preparar las mejores arepas de huevo de la región.

En la noche, después de la cena, los turistas se entretienen un rato en el karaoke y se van a dormir temprano. Hay mucho por hacer en Punta Faro y en toda la isla: bucear, pescar y caminar por los manglares.

Una caminata entre los espesos manglares

Ricardo Ramos es el guía asignado para dirigir una caminata por la isla. "Ahora van a saber por qué este es el paraíso", cuenta este nativo. Árboles centenarios, manglares enredados y cientos de especies de aves hacen parte del patrimonio. La caminata dura hora y media y termina en la playa pública de Isla Múcura, en la parte sur, a donde arriban lanchas repletas de turistas. Allí es posible comprar artesanías típicas o almorzar un buen pescado frito (desde $ 12.000).

Si usted va...

De Cartagena sale una lancha que en una hora y 40 minutos lo lleva a la isla. Cuesta $ 150.000 ida y vuelta. También puede llegar vía Montería-Tolú (Sucre). En Tolú, a las 8:00 a.m. sale una lancha que tarda una hora. Cuesta $ 40.000 cada trayecto. Inf.: www. clubnauticomaradentro. com.

En temporada baja la tarifa diaria por persona es de $ 250.000, incluidas las tres comidas. En temporada alta asciende a $ 400.000. Inf.: www.puntafaro.com.

Bucear: una experiencia inolvidable

En la isla vecina de Tintipán está una de las zonas coralinas más hermosas de Colombia. Allí, a cinco minutos de Isla Múcura, los turistas pueden bucear después de recibir instrucción. "Bucear en este lugar fue como ir a otro planeta, una experiencia maravillosa", dijo el turista Gustavo Hernández.

http://www.eltiempo.com/