El antiguo cañón de hierro del siglo XVIII desapareció de su base una plazoleta situada frente a la Universidad Politécnica, en Hato Rey, fue localizado a media mañana de hoy en una compañía de jardinería paisajista en Bayamón, quien lo custodiaba mientras su propietario era localizado.

El agente Ángel L. Negrón Maldonado, de la división de Propiedad del CIC de San Juan, explicó que se trató de un mal entendido ya que los propietarios de la compañía se llevaron el cañón de hierro, que pesa más de cuatro mil libras para evitar que fuera robado o vandalizado.
De acuerdo a la pesquisa, la compañía fue contratada por el Banco Gubernamental de Fomento (BGF) para realizar labores de limpieza en el solar yermo, para el 23 de diciembre del año pasado y mientras removían la maleza encontraron el cañón, el cual se convirtió de inmediato en una atracción para los transeúntes que se detenían en el lugar para tomarse fotos.
En una ocasión, reveló el dueño de la compañía, que llegó un individuo a ofrecerles $300 para adquirirlo, sin embargo, éste le explicó que no le pertenecía y que la transacción no se podía efectuar.
Al día siguiente, cuando la brigada regresó a realizar las labores observaron al mismo sujeto que quería comprarlo tratando de montar junto a otros individuos el pesado cañón en una guagua y tuvo que llamarle la atención.

“Al otro día cuando su brigada regresa, el supervisor ve al mismo individuo tratando de meter el cañón dentro de una guagua, era el mismo individuo que quería que se lo vendiera y decidió llevárselo para protegerlo mientras aparecía el dueño”, sostuvo el investigador.
El viernes, cuando escuchó la noticia, intentó infructuosamente de comunicarse con el BGF y no fue hasta el día de hoy que recibió una respuesta confirmando que el cañón le pertenecía al Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP), quien lo había reclamado antes de que se iniciaran las labores de limpieza.
El lunes por la noche, agentes de la división de Propiedad del CIC de la región de San Juan, acudieron a una residencia en Isabela, luego de que se recibieran confidencias de ciudadanos que observaron una guagua transportando un cañón, pero resultó ser que sólo pesaba dos mil libras y que su propietario tenía la documentación al día, reveló la teniente Wanda Torres, directora de la división.
La querella del supuesto robo fue presentada por el director del Consejo de Arqueología Subacuática de Puerto Rico, Juan Verga Vega, el 4 de enero, tras encontrar sola la base del cañón.
“El cañón estaba bien protegido para que no se dañara y será removido por la grúa de la Policía para su entrega al Instituto de Cultura”, agregó Negrón Maldonado.

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