La empresa Odyssey Marine Exploration localizó e identificó en el Atlántico Norte un carguero británico (el "Gairsoppa") hundido por los alemanes en 1941 con unas 219 toneladas de lingotes de plata, y dijo que trabaja en la recuperación del fabuloso botín.

Al igual que el "Gairsoppa", muchos barcos se hundieron en las profundidades, y con ellos su cargamento de oro, plata y otros valiosos tesoros. A menudo, pasan siglos hasta que vuelven a ver la luz. A continuación, algunos de los casos más espectaculares: - Agosto de 2010: Expertos finlandeses rescatan 70 botellas de champán perfectamente conservado de entre los escombros de un barco hundido hace 200 años ante las costas de la isla de Fgl. Se calcula que cada botella vale varias decenas de miles de euros.
- Julio de 2009: Una compañía de cazatesoros esperaba hacerse con al menos cinco millones de euros (6,7 millones de dólares) de los escombros del buque "Forbes" en Indonesia. La embarcación, que se hundió en 1806 entre Borneo y Sumatra, llevaba un botín del rey de Inglaterra. Los costes para desenterrar las monedas de plata, joyas de oro y otros valiosos objetos ascendieron a 400.000 euros (541.000 dólares).
- Mayo de 2007: La compañía estadounidense Odyssey Marine Exploration comunica el hallazgo de los restos de un barco en el Atlántico con unas 500.000 monedas de oro y plata por valor de 500 millones de dólares (unos 370 millones de euros). El Ministerio de Cultura de Madrid reclama los derechos sobre el tesoro de la fragata española "Nuestra Señora de las Merceders", hundida en 1804 ante las costas de Portugal. Recientemente, un tribunal estadounidense sentenció que el oro debe ser devuelto a España.
- Noviembre de 2000: Una espectacular subasta finaliza con unos resultados de 22,4 millones de marcos alemanes (unos 11,5 millones de euros/15,6 millones de dólares). En total fueron subastadas 350.000 piezas de porcelana que transportaba el buque hundido "Tek Sing".
- Septiembre de 1985: En los restos del "Titanic", hundido en 1912, se presumían tesoros de valor incalculable. Un equipo franco-estadounidense halló a más de 4.000 metros de profundidad una caja fuerte, pero en lugar del millonario tesoro que esperaban sólo encontraron billetes, monedas, collares, anillos, un reloj y una cartera, con un valor total de 5.000 dólares.


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