Ahorrar dinero para conocer la Reserva Marina de Galápagos es una excelente idea turística.
133.000 kilómetros cuadrados conforman la Reserva Marina del Parque Nacional Galápagos que es la segunda reserva más grande del mundo. En 1986, debido a la fragilidad de los ecosistemas por la actividad pesquera y la excesiva explotación de los recursos marinos, se empieza a implementar la idea de una reserva de recursos marinos y en 1998 se decidió declarar la Reserva Marina de Galápagos.
Las aguas del interior de las galápagos y todas las que se encuentren a 40 millas del extremo exterior costero son parte de la superficie de la Reserva Marina de Galápagos. Las especies nativas no pueden sobrevivir sin la adecuada protección de la biodiversidad de su ecosistema-terrestre y marino- ya que de estos depende su evolución.

Los pingüinos, lobos marinos, lobos peleteros y albatros, iguanas marinas, tortugas, aves marinas, ballenas, delfines y cormoranes son algunas de las especies que forman parte de esta Reserva que cuenta con más de 2.900 especies marinas.
Montes bajos, fondos rocosos, barrancos, playas arenosas, volcanes submarinos, arrecifes, manglares, lagunas costeras, humedales y zonas de intercambio de agua dulce son todos-unos con mayor importancia que otros- hábitats marinos de la Reserva Marina de Galápagos.
La Reserva está dividida en zonas de uso múltiple, zonas de uso limitado y zona portuaria. En las primeras se permiten -en aguas profundas- actividades pesqueras, turísticas, científicas, de conservación y navegación.
En las limitadas hay varias restricciones que buscan proteger a los ecosistemas de alteraciones, daños y escasez de recursos y se dividen en subzonas y en la zona portuaria, conformada por los 5 puertos principales, se pueden realizar actividades en la subzona Experimental o en la de Recuperación.