TEGUCIGALPA.- El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), Ramón Custodio, abogó hoy por los buzos del departamento de Gracias a Dios, y exhortó al gobierno a considerar la posibilidad de contar con una o varias cámaras hiperbáricas móviles sobre lanchas, con el propósito de reducir el número de personas afectadas con el Síndrome de Descomprensión, la cual provoca parálisis y en casos graves hasta la muerte.
Se estima que en los últimos años alrededor de un centenar de buzos han muerto y cerca del 20% de personas que se dedican a esta actividad sufren de parálisis, por la falta de medidas de seguridad adecuadas y carencia de un programa de capacitación continúa en buceo seguro.
Custodio, expresó que el departamento de Gracias a Dios merece especial atención del gobierno por el número alarmante e impactante de personas afectadas con el Síndrome de Descompresión.
Síndrome que se debe a las malas prácticas de buceo y pesca submarina, sin las estrictas normas que regulen el control de las mismas, convirtiéndose este problema en un fenómeno social.
Aseguró que la prontitud con que se atiende en el barco con mascarilla de oxígeno a los accidentados, la cateterización vesical (para evitar la retención de orina en la vejiga) y la atención en una cámara hiperbárica, mejora la posibilidad de recuperación de los mismos.
“Estas medidas son el tratamiento integral mínimo que debe recibir un buzo accidentado”, apuntó.
Custodio recordó que hace algunos años, la Embajada de los Estados Unidos de América donó una Cámara Hiperbárica, para darles el tratamiento necesario a las personas afectadas.
Agregó que la Cámara fue instalada en el Municipio de Puerto Lempira, situación que vino a mejorar el tratamiento casi inmediato que requiere este tipo de enfermedad.
El ombudsman hondureño reiteró que se debe considerar la importancia de este fenómeno, brindando todas las facilidades para la instalación de más cámaras hiperbáricas en la zona.
“El gobierno debe considerar la posibilidad de contar con una o varias cámaras hiperbáricas móviles sobre lanchas”, las cuales podrían estar bajo la responsabilidad de la Dirección General de la Marina Mercante, que con otras medidas básicas bajarían el alto riesgo”, recomendó el titular del organismo humanitario.
Un diagnóstico realizado por el CONADEH determinó que el buceo submarino es una actividad de alto riesgo ya que las sumersiones a mayores profundidades provocan en los buzos la enfermedad del Síndrome de la Descompresión, la cual provoca parálisis parcial, parálisis total y en casos graves la muerte, debido a la obstrucción del sistema circulatorio por exceso de nitrógeno en el cuerpo.
Se estima que el departamento de Gracias a Dios cuenta con una población aproximada de 70,000 habitantes de los cuales el 85% lo integran cinco grupos étnicos: Los Tawahkas, Los Pech, Los Garifunas, Los Ladinos y Los Miskitos, quienes facilitan, en un alto porcentaje, la mano de obra para el buceo y pesca de langosta y caracol.
El 26.76% de la población total del departamento de Gracias a Dios estaría dependiendo directamente de los ingresos que genera la actividad de la pesca submarina.
Señala el diagnóstico que 19% de los buzos de la región de la Mosquitia hondureña sufre del “Síndrome de Descompresión”, principalmente, por falta de observancia en las normas de seguridad ocupacional propias de esta actividad.
De acuerdo al informe, la edad promedio en que los jóvenes miskitos inician la actividad de buceo submarino es de 17.4 años.
Al parecer, los ayudantes de los buzos conocidos como cayuqueros, son en su mayoría menores de edad y comienzan sus inmersiones empíricamente a partir de su tercera o cuarta salida al mar y si no hay mayores dificultades, en posteriores viajes ejercen la actividad del buceo.
El diagnostico determinó que el mayor número de accidentes se presentan entre los buzos con 6 a 10 años de experiencia y una menor incidencia entre los buzos que tienen más de 10 años de experiencia.
Esta tendencia, según el CONADEH, se relaciona con otros factores como la edad y capacitación recibida; de este modo, un buzo de mayor edad es más precavido y aplica mejor la capacitación recibida en comparación con los buzos jóvenes.


Las principales causas de los accidentes por buceo submarino:
•Buceo en profundidades mayores de 18 brazadas (120 pies, 36.58 metros), debido a la escasez de productos (Caracol y Langostas) en las áreas de menor profundidad, lo cual conlleva mayores riesgos (corrientes marinas más fuertes, mayor absorción de nitrógeno en la sangre).
•Acumulación de partículas contaminantes, por mal mantenimiento en los tanques de buceo, con los problemas respiratorios consiguientes.
•Falta de conocimientos y la inobservancia de la normas de buceo seguro.
•Carencia de equipos adecuados y falta de capacitación continúa en buceo seguro.
•Falta de primeros auxilios adecuados al momento del accidente y de logística para trasladar al paciente a la cámara hiperbárica.


Fuente: http://www.latribuna.hn