Cinco robots con forma de peces y con capacidad de medir el oxígeno en el agua y los niveles de sustancias contaminantes a través de sensores se utilizaráb en el Puerto de Gijón para monitorear los niveles de contaminación en la zona.
Los robots, que nadan como si fueran peces de verdad para camuflarse en la naturaleza y evitar que la fauna acuática se asuste, funcionan con baterías eléctricas y pueden comunicarse con una central a través de Wi Fi y compartir datos entre ellos.
Esta actividad forma parte del Proyecto SHOAL, que es un proyecto europeo de investigación financiado con cargo al 7º Programa Marco, en el que participa la Autoridad Portuaria de Gijón