Un grupo de científicos y estudiantes investiga la vida marina en unos arrecifes de coral mesofotónicos encontrados a unos 100 metros de profundidad en el suroeste de Puerto Rico, una distancia a la que jamás se habían descubierto esos ecosistemas.


El profesor estadounidense Richard Appeldoorn, investigador principal del equipo que descubrió estos arrecifes, explicó que la investigación empezó en el otoño de 2007, pero solo un año después se comenzó a encontrar vida marina en el área de La Parguera en Lajas, en la zona suroeste de la isla.


"Era un área que nunca se había explorado. La investigación revelará información nueva a la ciencia y con el pasar del tiempo, publicaremos lo que investigaremos", enfatizó.


Appeldoorn, quien lleva trabajando en la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez desde 1981, agregó que lo que se ha encontrado hasta el momento "es emocionante" y es "un área nueva y diferente" para documentar lo que observan casi a diario.


"No teníamos idea de cuán extensos, vibrantes y diversos son esos ecosistemas de arrecifes de coral mesofotónicos a las afueras de la Parguera", dijo Appeldoorn.


Indicó que en La Parguera se encuentra el centro de arrecifes de coral más importante del mundo, por lo que mucha gente de todas partes lo visitan y se maravillan del lugar.
"Lo que más nos ha sorprendido es que hemos encontrado arrecifes de coral que nunca se habían descubierto antes. El equipo de investigación llegó al punto perfecto", afirmó.
Los ecosistemas mesofotónicos son los arrecifes de coral que dependen de la luz y que están a mayor profundidad en el mar.


Appeldoorn señaló que parte de la investigación será conocer la rapidez con la que crecen los arrecifes de coral en esa zona, donde viven tiburones grandes, pero que no molestan a los buceadores.


"Como casi todo es nuevo, tomará un tiempo prolongado para tener resultados científicos", aseguró.


El anuncio del hallazgo de arrecifes de coral da esperanza para que los peces que viven en esa formación sirvan para reponer su población en arrecifes menos profundos y en estado de degradación, según dijo la Administración de Océanos y Atmósfera Estadounidense (NOAA), en un comunicado de prensa.


Estos arrecifes fueron descritos como un ecosistema extenso y biológicamente diverso que se encuentra dentro de un tramo de 12 millas (19 kilómetros) de la costa suroeste del país caribeño.


El descubrimiento fue hecho en colaboración con científicos financiados por la NOAA, estudiantes de la UPR de Mayagüez y del Instituto Caribeño del Arrecife de Coral y la Universidad de Carolina del Norte Wilmington.


La NOAA dijo además que debido a su profundidad, esos arrecifes no se podían explorar con equipo tradicional de buceo y que gracias a los avances recientes en las técnicas de bucear, permiten ahora a los científicos hacer los estudios de manera segura.


Por su parte, Kimberly Puglise, del Centro para el Auspicio de la Investigación Oceánica Costera de la NOAA dijo que en Puerto Rico a profundidades mesofotónicas se están encontrando especies de peces que anteriormente residían en abundancia en arrecifes de menos profundidad, como el tiburón de arrecife y el mero.


El director del Programa de Manejo de la Zona Costera de Puerto Rico, Ernesto Díaz, añadió que por la información que le han proveído de la investigación, reconoce la necesidad de proteger extensivamente los ecosistemas de coral mesotóficos en la isla.