Los cazatesoros esperan que el nuevo presidente uruguayo levante el decreto de 2.007 que prohibe la extracción
El gobierno uruguayo puso en jaque a los cazatesoros en 2.007, tras rechazar las autorizaciones firmadas por anteriores gobiernos para extraer los pecios hundidos repartiendo los beneficios a partes iguales entre los extractores del tesoro y el gobierno uruguayo. En el Río de la Plata se calcula que existen mas de 1.000 buques hundidos, muchos de ellos con enorme valor en sus entrañas. Tras el cambio de política, el gobierno uruguayo en 2.007 emitió un decreto por el que prohibía la actividad, algunas empresas de cazatesoros, se han quedado con el agua al cuello, al haber sufragado parte de las exploraciones, y haber tenido que cancelarlas por el mencionado decreto.
Los buscadores de naufragios no descartan litigar juntos contra Uruguay, pero antes quieren hablar con el nuevo presidente José Mujica,en el poder desde marzo de 2.010, para tratar de desbloquear la situación.
Pecios hundidos
Mas de 1.000 buques yacen en los fondos de este enorme río, formado por la unión de la desembocadura de los ríos Paraná y Uruguay, formando la frontera natural entre Argentina y Uruguay. El Río de la Plata tiene bajo sus aguas, muchos de los barcos que comunicaban latinoamérica y España. Pecios famosos por sus tesoros como el "Nuestra Señora de Atocha" cuyo tesoro fue muy polémico por el juicio que se desató por su propiedad entre el gobierno español y sus expoliadores.
Montevideo, la capital uruguaya, y Buenos Aires, la argentina, se ubican en las orillas del Río de la Plata, lo que hacía que esta ruta fuera navegada continuamente por galeones en la época de oro de España, durante la época colonial. El Río de la Plata, con sus corrientes, enormes olas y errores en sus cartas de navegación (hasta 1857), se convirtió en una trampa para cientos de buques, arrastrando su mercancia y marineros al fondo. Solo en el denominado banco inglés (una barra de arena que emerge) hay constatados mas de 250 pecios.
Pecios existentes
Barcos como el navío "Agamemnon"que participó en la Batalla de Trafalgar (1805) al mando del almirante Nelson, yace en la Bahía de Maldonado, frente a Punta del Este, donde naufragó en 1809, y del que se recuperó un cañon.
El pecio "La Asunción" se ha comido ya 6 millones de euros en trabajos de prospección, sus operaciones se cancelaron por el decreto de 2.007 para desesperación de los promotores de su extracción.
El acorazado alemán "Admiral Graf Spee" se hundió cerca de Montevideo en 1939 a comienzos de la segunda Guerra Mundial (en 2.006 se recuperó un águila imperial y algunos signos nazis junto a otros hallazgos en 2.004 y 2.006) pero sigue bajo el agua tras el decreto.
En 1989, se halló el pecio del "Nuestra Señora de la Luz", naufragó el 6 de julio de 1752 con una "carga declarada de más de un millón de pesos de la época en oro y plata, pero llevaba 10 veces más de contrabando", según el buceador que durante 10 años rescató el tesoro que se repartió a medias con el Estado en 2.003. La fragata "Nuestra Señora de Loreto", naufragó el 28 de mayo de 1792 en la Bahía de Montevideo durante una tormenta. En 1986, cazatesoros la localizaron y recuperaron un cañón, pero las operaciones de extracción tuvieron que cancelarse al ser declarada patrimonio histórico.
El navío inglés "Lord Clive", con 64 cañones de bronce, se hundió el 6 de enero de 1763, frente a la ciudad de Colonia durante el intento de asedio para quedarse con la ciudad española al mando de una flota de buques portugueses e ingleses.