Viejas historias de un ilustre Pepe el Instructor

Soy instructor de buceo desde hace más de 25 años. Quiero, por primera vez, dara conocer públicamente la experiencia mas dramática que he vivido en toda mitrayectoria que tuvo lugar hace ya unos cuantos veranos. Lo doy a conocer sin fechas,nombres, ni lugares para preservar la intimidad de los que sobrevivimos aaquella situación y, ..., evitar posibles represalias.

Llegaron a mi centro una mañana de fuerte temporal de viento y lluvia un grupode guiris que manifestaron interés en bajar a un conocido pecio que hay poraquí cerca. La verdad es que no había tenido clientes desde el verano anteriory aunque varias de las botellas acumulaban óxido en sus griferías y no disponíade equipaciones suficientes, acepté el ofrecimiento.<!--?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" /--><o:p></o:p>

Ya desde el principio no me gusto la actitud de una pareja que no paraban deinsistir en pedirme que les alquilara un arpón de aire comprimido, que se conecta a una salida HP de la botella, que utilizo yo para pescar algún que otro mero o abadejo. (Tengo localizada una cueva donde todos los años en Mayo hay varias crías de mero que tienen una carne deliciosa...). Como fue tal su insistencia y mi situación no es muy boyante, que digamos, accedí al alquilerdel arpón por una interesante cantidad de euros.<o:p></o:p>

Mientras buscaba por el viejo almacén los equipos, tuve que tomar una arriesgada decisión. Varios de los reguladores que disponía en mejor estado,tenían algunas tóricas cuarteadas (un estúpido inglés que decidió secarlos,hará ya un par de años, a la solana y yo olvidé recogerlos hasta que transcurrieron unos meses). A pesar de eso y puesto que son magníficos reguladores, de reputadísimas marcas y, además, su buenas pesetas me costaron, no les dije nada y los acoplé, como pude, en los equipos, ayudándome, en algunos casos, de algunos pedazos de cinta americana. Algo que vi hacer al de Bricomanía hace unos días reparando unas cañerías.<o:p></o:p>

Otro problemilla durante los preparativos. Algunos de los chalecos eran demasiado pequeños, no les abrochaban las cinchas, ni siquiera apretando entre varios (que armarios eran algunos de los guiris!), por lo que tuve que improvisar con cuerdas de cáñamo y alambres unas firmes sujeciones para que pudieran abrochárselos. No me quedaba mucha cuerda porque tuve que fabricar algún cinturón para los plomos, porque no tenia suficientes.<o:p></o:p>

Tampoco tenía las máscaras necesarias (es que era un grupo realmente numeroso,no los conté, pero por lo menos eran más de 8) por lo que tuve que tirar de las gafas de natación que utilizan mis sobrinos para hacerse largos de 4 metros en la piscina del adosado.<o:p></o:p>

Humildemente, creo que resolví con rapidez y eficacia los problemas de logística que se fueron presentando. Los años de experiencia que acumulo en este negocio son un factor clave para tomar decisiones que permiten llevar a buen fin una inmersión. Tengo que reconocer que, sin embargo, en este caso multitud de factores negativos, no controlables o predecibles, se confabularon contra mí aquella aciaga mañana.

Antes de salir, nos tiramos mas de 2 horas desayunando churros con carajillos que yo tomo normalmente por las mañanas pero, claro, como ellos no estaban acostumbrados no veáis como se pusieron de contentos. Se empeñaron en hacer prácticas de tiro con el arpón a unas gaviotas que anidan cerca del embarcadero. El problema es que un imbécil apuntó mal y le dio de refilón por babor a la semirígida de la Guardia Civil y ésta empezó a perder aire, haciendo un ruido tremendo, como una pedorreta larguísima, y tuvimos que embarcar a toda ostia, dejándonos en tierra parte de las equipaciones.<o:p></o:p>

Durante la travesía observé que mi vieja neumática perdía aire cuando vi que mis clientes, sentados sobre la goma, cada vez estaban cada vez mas encuclillas. Decidí parar e hinchar un poco utilizando una botella de 10 lts. de un buceador que, con el pedo que llevaba iba algo dormido, y no se dio nicuenta.<o:p></o:p>

Tardamos mucho en dar con el pecio. Al no estar balizado en superficie (son 2de mis actuales defensas de estribor) ni disponer yo de SMS (Sistema Marítimode Señalización, creo, ese que va con los satélites), hice que el chaval que estaba dormido, para que se espabilara, bajara varias veces para localizarlo(resultaron ser más de 10 o 15 intentos).

Cuando dijo que lo encontró (la verdad es que no le tuvo que resultar fácil,porque estaba a mas de 35m y la visibilidad aquel día no era muy buena, tuvimos que esperarle casi hora y media), le note los ojos rojísimos y un extraño espasmo en la parte derecha de la cara, por lo que le hice subir y le apliquéuna cataplasma de Sun Protection Care factor 25 porque creo que pilló una insolación en la travesía, ya que no se puso la gorra del centro de buceo que regalo como deferencia a todos mis clientes. No es exactamente merchandising,porque en las gorras pone Carrefour (me las da mi cuñada que es cajera allí ).Pero como ellos eran extranjeros, supongo que creerían que se trataba de alguna expresión española.<o:p></o:p>

No disponía de ancla para fijar la embarcación ya que al salir por la bocana del puerto, con todas la prisas y el cachondeo, un guiri idiota la arrojó para aplastar un pulpo y la enganchó entre unas rocas.<o:p></o:p>

Tuve, nuevamente que improvisar y tomé la decisión de llenar de plomos el chaleco del que tenia la insolación y se había vuelto a dormir, entre unos curiosos espasmos. Le até con unos alambrillos que tenía por el barco el regulador a la boca y le lancé al agua. No veáis como reían los amigos del chaval cuando, sumergiéndose, iba despertándose abriendo los ojos y moviendobrazos y piernas. No le puse aletas para que no perdiéramos el pecio.<o:p></o:p>

Durante la equipación, y como siempre, a última hora, varios de los buzos no estaban seguros del lastre que podrían necesitar por lo que les aconsejé que llevaran algunos kgs de más en los bolsillos de los chalecos y los incorporaranal cinturón en caso de que tuvieran problemas al hundirse.<o:p></o:p>

Aquel sábado había mucho tráfico de embarcaciones a vela, porque soplaba un levante de fuerza 4 y el oleaje, en ocasiones, no superaba la borda. Con semejante vaivén, los trozos de churros y el olor a carajillo en el barco erainsoportable, y el caos, insuperable, por lo que tomé la decisión de abreviar y no hacer briefing.<o:p></o:p>

Al grito de "seguidme!" me lancé al agua.<o:p></o:p>

Una vez que todos estábamos en el agua (la verdad sea dicha, no sé si estábamos todos porque el oleaje no medejaba ver a muchas de las cabezas del grupo entre cresta y cresta) vi subir del fondo un hilillo negro, ... del Prestige, pensé yo,... pero no ... era un sedal negro subiendo, ... los joputas del arpón que estaban ya entre dos aguashaciendo practicas con los que aún estábamos en superficie,la madre quelosparió...!

... hasta que vi al del peluquín, chillando como un cochino, salir del agua,varios cm, con un arpón clavado en semejante parte. Era lamentable ver a un tío vestido de madelman buceador, chillar así. <o:p></o:p>

Nos dimos todos los que nos podíamos ver el ok (menos el del peluquín, quedecidió suspender la inmersión porque decía que le dolía el trasero, ...¿porqué la gente bucea sin estar en condiciones?, siempre me lo preguntaré ) y comenzamos a descender lentamente. Bueno, ... no todos, porque algunos le encontraron la gracia a jugar con el inflado del jacket y mientras subían a toda ostia, otros teníamos que esquivarlos mientras descendíamos. Eran unos cachondos. Aquello era como un pinball en 3D y nosotros éramos los bumpers ...cada vez que me daban, la carcasa de la OLY 5050 soltaba una burbujita,...,joputas...<o:p></o:p>

<o:p> </o:p>Veía a los open water pasarse los plomos unos a otros, para hundirse, cogidosde las manos. ¡Qué bonita estampa y cuantos amigos se hacen con esto del buceo!<o:p></o:p>

Cuando llegué a la cota del ancla (al de la insolación), le cerré un poco la botella, porque vi claramente que estaba hiperventilando, se le veía muy agitado, y trataba constantemente de moverse, ante lo que me puse serio y,aplicando las técnicas del rescue, le tuve que tranquilizar, como pude, explicándole que le haría un descuento por su inmersión (es fácil hacerlo por señas, si se practica). A pesar de eso, para mayor convencimiento, le tuve que enganchar con unas bridas a unos salientes. Y se terminó el cachondeo.

A 45m había una termoclina del copón. Varios de los buceadores habían bajado con una licra porque, pensé yo, a primeros de Agosto no haría mucho frío.
Creo que me equivoqué.<o:p></o:p>

En cualquier caso, algunos de mis neoprenos, cuando los saqué del almacén,buff! cualquiera se metía ahí dentro, ... jooder!, no nos hicimos con ellos.Allí quedaron, de pie, parecería que despidiéndonos, impasible el ademán. Con aquel olor ... que nunca olvidaré.<o:p></o:p>

Para ayudarles a entrar en calor, me puse a funcionar. Me alejé de ellos unos metros, en contra de la corriente, y empecé a hacerles la señal "sinaire" escandalosamente. Los que eran OWD se dirigieron hacia mí, a todaostia, con el octopus en la mano. Os puedo asegurar que se chuparon 30 o 40bares en mi rescate, ... pero entraron en calor.
Al resto, los que hacían el bautizo, los acojoné (la seña es que se las trae para un neófito, eh?). Ya no se fiaron de mí, lógico, preguntándose qué habían hecho mal. Pero conseguí que no me perdieran de vista a partir de entonces. <o:p></o:p>

Iniciamos el descenso lentamente. La oscuridad nos iba engullendo. Me sentía abrazado por el silencio, sólo roto por mi respiración ... y por los golpes que me propinaban constantemente mis clientes desarmándome de máscara y regulador.Casi siempre yo iba marcando el ritmo y encabezaba el grupo. Sinceramente, no sé quien lo cerraba. Aquello se asemejaba bastante al movimiento de las amebas.

Pocos metros más adelante, bordeando la curva del veril, se insinuaban,majestuosas, desafiantes, la primeras sombras del pecio.<o:p></o:p>

El barco es un carguero de mas de 30 metros de eslora, hundido a finales de los 80, justamente cuando intentó esquivar mi viejo pesquero "Ana Mari",antes de encallar. Está algo escorado de babor, y mantiene casi intacta la estructura de sus bodegas. No tiene mucha vida porque a lo largo de estos últimos años he bajado muy a menudo.<o:p></o:p>

Buenas pesetas se hacen vendiendo pequeñas morenas y congrios disecados, alguna que otra langosta al del bar de la plaza y, sobre todo, grandes nacras y cachos de gorgonia para los de los souvenirs. Es lo que llaman "economía sostenida", porque me sostiene a mí.<o:p></o:p>

Dirigí mi foco hacia la parte de la cubierta cercana a proa y ya estaban dos,como siempre, haciendo el gili*****s como el Leonardo di Caprio. Allí quedó uno de ellos, intentando zafar su pierna que quedó aprisionada entre unos cabos.Interpreté que me hacía la señal de "seguir sin mí", por lo que reunía los que quedaban del grupo inicial, encendí el único foco que teníamos (es lomejor para que la gente no se disperse) y nos adentramos todos juntos en las bodegas del pecio para explorarlo ...<o:p></o:p>

La entrada a las bodegas se hace desde la cubierta por una abertura bastante estrecha. Algún gordo no cabía bien y tuvimos que empujarle. Uno (que risa) me acuerdo que sufrió un ataque de pánico cuando quedo encajado y los joputas delarpón le pinchaban desde dentro. Como no se acordaba de la regla de oro"parar, respirar, pensar y actuar", tuve que pararle yo y le arreé una ostia para que se tranquilizara y el resto ya lo hizo él. Creo que, alfinal, pudo pasar.<o:p></o:p>

<o:p> </o:p>A medida que avanzábamos por las primeras estancias, el silencio, sólo era roto por los que hacían el bautizo cayendo como tortugas boca arriba. Los sedimentos levantados por los que no llevaban aletas e iban lastrados con 4 o 5 pastillas de 5 kg hacían tarea difícil ver a más de medio metro. A los dos minutos ya estaba solo en la mayor de las bodegas y observé, por el tacto, que nadie me seguía. Utilice e lpato del chaleco para llamar la atención del grupo pero nada. Empecé a preocuparme porque no se veía un carajo. El silencio era absoluto, sólo roto por algún "clon, clon" lejano, sonido que atribuí a los del bautizo dandose ostias por las puertas. Decidí quedarme totalmente inmóvil y esperar un minuto. Como nada vi, empecé la búsqueda y rescate de mis clientes. Mire en doso tres sitios que yo pensaba eran buenos escondites pero no aparecían, así quedecidí suspender el rescate, porque, según la regla de los tercios, sólo mequedaban ya 2/3 de aire, uno de ellos para volver y el otro por si surgía algún imprevisto.<o:p></o:p>

Mientras iba abandonando las últimas bodegas, antes de salir fui encontrando avarios de mis clientes en estado de agitación. Pensé que estaban mosqueados porque la inmersión estaba llegando a su fin. Vi a alguno que le pegaba chupadas directamente a alguna salida de alta presión de la botella mientras la inclinaba hacia arriba como si fuera un botijo. Vaya unos ratas, pensé yo, que se van a esperar por 60 euros, que les ponga 200 bares ...?
Los que estaban haciendo el bautizo estaban atascados, por su inexperiencia, en la primera puerta de entrada y a algún idiota le vi chupar del snorkel con cara de bastante asombro porque no le llegaba aire ... y mira que les expliqué en elcentro mientras tiraban del Soberano, por donde tenían que respirar... Total,que agarré a los pocos que encontré, les inflé el jacket a tope y tiraron pa arriba 40 y tantos metros. A ver quien les convencía de suspender la buceada después de disfrutar tanto.<o:p></o:p>

<o:p> </o:p>Avancé en solitario unos metros más para desenredar al del ancla, que me echó una mirada que no quiero recordar porque se me ponen los pelos de punta. Supongo que estaba cabreado por no haber podido disfrutar completamente de lainmersión. Subí con él, lentamente, hasta los 5m y, por precaución, hicimos la parada de seguridad. A pesar de esa medida preventiva, su Aladín pitaba como un loco el condenado. Seguramente se quejaba del agotamiento de la pila. La gentees que baja con sus equipos en un estado lamentable.<o:p></o:p>

Cuando alcanzamos el bote observé con claridad el agujero por donde perdía aire(curiosamente con la forma de la punta del arpón) así que cogí al de la insolación que seguía estando como jili*****s haciendo extrañas muecas, y le introduje la punta del miembro masculino (con perdón) para evitar que nos fuéramos a pique. Vaya mierda de ofertas que hacen los de Carrefull, pensé. Apenas si había sobre el barco 2 ó 3 buceadores con lo que me pillé un mosqueo del copón, pensando en que el resto se había largado con las equipaciones. Después de esperar mas de 5 minutos para ver si venía el resto del grupo,agarré y puse proa al puerto para interponer la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil por robo de material.
No os imagináis como nos reímos viendo dar culadas al de la insolación durantela travesía ...<o:p></o:p>

<o:p> </o:p>De vuelta a puerto, tuve suertede encontrarme con un par de peces luna que descansaban plácidamente en lasuperficie. Ellos, todo sea dicho, no tuvieron la suerte de encontrarse conmigo. Convenientemente rellenados se convirtieron en unos estupendos"puf" en el salón de mi casa. Aunque pasaron varias semanas hasta que el olor a hembra terminó ...<o:p></o:p>

Pero aquello no fue sino un pequeño alivio en el desfalco del que acababa de ser víctima. No sólo me dolía la desaparición de los equipos que me acompañaron durante los últimos 25 años, sin tener que pasar una sola revisión, tal era sucalidad, sino que además, estaba endemoniado por el pago que aquellos sinvergüenzas hicieron del trato profesional y atenciones que recibieron de mí aquella mañana. Menos mal que cobro por adelantado. Soy un viejo lobo de mar.<o:p></o:p>

Pero los problemas no habíanhecho sino empezar. El motor del Ana Mari II empezó a hacer unos ruidos, como eructos, parecidos a los estertores que hacen los caballitos de mar cuando los sacas del agua. Poco a poco, fuimos perdiendo velocidad, hasta que una pequeña explosión, muy poco digna, la verdad, marcó el final de mi fiel 49cv.<o:p></o:p>

El oleaje comenzó a superarnos y la fuerte corriente nos arrastraba maradentro. Tenía que hacer algo.<o:p></o:p>

Siempre he pensado que el éxito viene de la mano del esfuerzo y del trabajoconstante, pero, a veces, la suerte es imprescindible. El Dios Neptuno cruzó en mi camino una enorme embarcación plagada de tíos negros. Conté más de 40cabezas y algunos más que iban tumbados. Aquello se convertiría en mi tabla desalvación.<o:p></o:p>

Luego se oyen barbaridades sobre algunos centros que convierten el buceo, que debe ser una actividad lúdica y de recreo, en algo industrial. Tenía delante de mí el ejemplo de lo que digo. Vamos, aquello, no parecía buceo industrial,aquello parecía el desembarco de Normandía. Iban tantos tíos a bordo que no les cabían los equipos. ¿Qué pretendía el dueño del centro? ¿Hacer una salida apulmón?. ¡Que vergüenza!. Aquello, con toda seguridad, era una salida pirata.Se podían adivinar, incluso, las cabezas de algunos niños, que posiblementeiban a hacer el Bubble Maker.

Se van a cagar éstos, pensé. Decidí entrar en acción. Coloqué la gorra, suerte que era de color verde, de Carrefull a los 3 clientes que venían conmigo, con la visera hacia atrás y cogí mi esnorkel, apuntándoles. Peazo calibre debería parecer que tenía aquella arma. Al de la insolación que estaba tumbado sobre la goma, de aquella manera, coloqué el remo entre los brazos, apuntando, como unSWAT, a la otra embarcación.<o:p></o:p>

"¡ALTO A LA GUARDIA CIVIL!", les grité. Levantaron todos las manos.Desde mi distancia parecía aquello un escarabajo gigante flotando boca arriba.De coña.<o:p></o:p>

Les largué un cabo y nosaproximamos con energía. Comenzamos el abordaje.<o:p></o:p>

"¡A VER, DOCUMENTACION, PAPELES, PAPELES!" les grité una vez a bordo...... Jooooooder, se quedaron todos blancos. Igual que si hubieran visto al gran blanco en persona ... ¡Aaaahhh!, además iban todos sin licencias de buceo eh?. Eso ya me tocó la moral. Luego dicen de competencia desleal ...<o:p></o:p>

A pesar de las dimensiones de la embarcación, apenas tenía espacio para moverme. Estaba realmente cansado de tanto caos aquel día y necesitaba espacio vital desesperadamente.

Me pareció de justicia y para que a aquel grupo de piratas les sirviera como lección, se me ocurrió hacer un intercambio de embarcaciones. Además no hubiéramos podido alcanzar la costa en su barco, dado que allí no cabía ni un alfiler. Les ordené que se pasaran al Ana Mari II. Fueron momentos difícilesporque la mayoría de ellos estaban torpones, con unos temblores terribles, posiblemente por el acojone de ir sin papeles. Así aprenderían para la próximavez. De hecho, aproveché para darles a todos un calendario del mundial 82 con la dirección de mi centro de buceo, aconsejándoselo para su siguiente salida.

El orificio del arpón en la goma de mi Ana Mari había cogido bastante holgura y el miembro (con perdón) del de la insolación, que ya pasaba del medio metro, no tenía grosor suficiente para detener la pérdida de aire. Tuve que pedirle a uno de aquellos mandingas que relevara a mi cliente de esa función. Tuvimos que agrandar un poco aquel agujero en la goma porque "aquello", sin entrar en más detalles, no cabía ni queriendo. Además, el de la insolación,nuevamente tenía que ayudar al fondeo de mi barco para que la corriente no selo llevara a Tánger.<o:p></o:p>

No cupieron todos, lógicamente en una neumática varias veces menor que el barco que traían, y varios de ellos, desde el agua, tuvieron que agarrarse a lo que buenamente pudieron.

Si, ya sé que podría haberles remolcado, sobre todo porque el barco pirata llevaba 2 motores de 150cv pero si quería renovar mi inmovilizado y crecer en mi capacidad de ingresos, tenía que ser así.<o:p></o:p>

Joder, cómo cortaba el oleaje mi flamante nuevo Ana Mari III.

Al llegar a puerto observé un inusitado tráfico de embarcaciones medicalizadasde la cruz roja y del ejército. Incluso algún que otro helicóptero y un numeroso despliegue de la Guardia Civil. Aun no entiendo el porqué de la envergadura de semejante despliegue. Imagino que se trataba de algún ejercicio de prácticas o simulacro.<o:p></o:p>

Me puse a tres nudos y me dirigí a mi amarre, un mojón de cemento que planté aun metro bajo el agua para que no se viera y ahorrarme una pelillas.<o:p></o:p>

Rápidamente me personé en el cuartelillo para denunciar al pirata de los negros y al grupo de guiris que me había robado el material.<o:p></o:p>

Escribo estas notas desde la prisión de Carabanchel, donde me mandó aquel injusto tribunal, supongo que por disfrazarme de Guardia Civil. Tonto de mí que olvidé quitarme la gorra verde. El próximo mes de Mayo me dan el tercer grado y reanudaré con más energías que nunca mis actividades subacuáticas.<o:p></o:p>

Espero que tú que estás leyendo estas notas tengas curiosidad por conocer mi centro y quieras pasar un divertido día conmigo. Eso sí, de momento, las salidas de infantería. Y no puedo alquilar nada de equipación, porque me fue sustraida ... o sí?..... creo que aun me quedan algunos chalecos y reguladores....<o:p></o:p>

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<o:p> </o:p><o:p>Espero que hayais pasado un ratillo divertido, es antiguo pero creo que sigue siendo gracioso.</o:p>
<o:p>Un saludo</o:p>
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Espero que no sea cierto todo esto. Y si lo es... te agradecería que me dieras el nombre del personaje ese, para no ir NUNCA a su encuentro.

un poco de humor, ampliamente alargado con guiris, y ademas con cierto estilo literario, siempre es bueno. Creo que ire a tu centro a por una gorra de carrefour. Gracias por el divertidp rato de lectura.

Dicen los que entienden que el humor es el motor de la vida, con cada sonrisa movemos mas de 400 musculos ....jjj
Ganxex, no te preocupes que Pepe se paso al buceo TEK y recauchutados.....
Un saludo

Genial sentido del humor a lo Eduardo Mendoza. Jo**r con el Pepe...

Mis pequeños discípulos (y lascivas discípulas).

Imagino que aquellos que hayáis leido adecuadamente mis andanzas en este foro (incluida la sección especial dedicada a mi siempre humilde persona) habréis reconocido al punto que al bueno de Pepe le enseñé yo todo lo que sabe, desde montar una primera etapa con el capuchón de una bombona de butano hasta convencer a los civiles de que los peces que habían saltado milagrosamente a su barca mientras navegaba inocentemente por aquella reserva marina no tenían nada que ver con él.

Me ha enternecido volver a recordar aquellas historias de este aventajado discípulo de vuestro gran Maestro Chupiguay. Qué grandes momentos pasábamos los dos aprovisionándonos de equipo TEK ultra-profesional en el Carreful, y eso que ya le decía yo que en el momento en que dejasen de regalar bolsas se nos iba a poner algo más complicado lo de disponer de boyas deco y equipos estancos pero bueno, tampoco importa mucho porque Pepe, siempre que le decía yo que necesitábamos algo estanco se levantaba de la mesa y me decía que se iba a buscar tabaco (la última vez fue hace unos cuantos años y no había vuelto a saber nada de él hasta hoy).

Espero que sigan publicándose por aquí sus andanzas y... bueno, a ver si algún día logro salir de esta cómoda celda donde me hallo por unos pequeños deslices con varios niñatos a los que estuve instruyendo y os cuento yo también alguna más (seguro que fue todo culpa del idiota de Alex "El Manco", y mira que siempre le insistí en que si quieres hacer feeding en serio con tiburones blancos no pasa nada si fallas la primera vez, porque al menos te queda una segunda oportunidad... hay gente que no tiene paciencia)

Hala, a seguir bien.
Chupiguay

Ya se notaba ohh gran maestro tu doctrina.. al igual que se añora y hecha en falta tu presencia por aqui.. esperemos que los abogados hagan bien su trabajo y que pronto tengas de nuevo esa libertad para compartir con todos nosotros tus enseñanzas.

Gracias por volver Gran Maestro!!!. Que Jari, no se preucupe, el tema carcelario, ya esta resuelto, su señoria era Padi. Ahora sólo queda el reciclaje de mergulhador que debe de tener obsoleto, en las últimas andadas. Escribir ya sabemos que sabe .