La ley responsabiliza a las empresas de utilizar los equipos de buceo adecuados

La acusación del secretario general del Sindicato Estatal de Buceo, Luis Torcida, sobre las posibles irregularidades que pudieron haber provocado el accidente en el que perdió la vida el buzo Daniel Heres, cuando trabajaba en el arranque de ocle en aguas gijonesa, sólo ha tenido respuesta de la Capitanía Marítima en el sentido de que el citado organismo ha cumplido las obligaciones que le atribuye la ley.
Ambas versiones no son necesariamente contradictorias, ya que la orden ministerial que regula el sector responsabiliza a las empresas que contratan submarinistas tanto de comprobar su capacitación para desempeñar el trabajo como de la adecuación de los equipos utilizados a lo prescrito por la normativa vigente.
La Capitanía Marítima tiene facultades de inspección en el caso del buceo, pero no obligación inspectora a la hora de despachar a los barcos.
Eso explica que el 'Biempica Tres' no haya sido inmovilizado por la Administración Marítima tras el accidente y que haya podido salir nuevamente a la mar.
Al parecer, los barcos que participan en la campaña del ocle son autorizados por la Dirección General de Pesca para efectuar dicha actividad, y la Capitanía Marítima despacha los barcos conforme a la citada autorización.
La actuación de la Capitanía retrasó la campaña el pasado año al exigir pruebas de estabilidad con carga en cubierta a los barcos.

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