Egipto acusa a diplomáticos belgas de dañar fósiles ballenas con sus todoterrenos
Egipto ha acusado a diplomáticos belgas de causar daños en fósiles de ballenas, considerados patrimonio de la humanidad, después de pasar sobre ellos con sus vehículos todoterreno, dijo hoy un cargo del Ministerio del Medio Ambiente.
Mohamed Ibrahim, de la Administración de Zonas Protegidas del ministerio, explicó hoy a Efe que los diplomáticos entraron a mediados de julio irregularmente en el llamado Valle de las Ballenas, Patrimonio Natural de la Humanidad de la UNESCO, donde se conservan restos de cetáceos de hace más de 40 millones de años. "Los vehículos destrozaron una parte de la columna vertebral del fósil de una ballena considerada única en el mundo", dijo Ibrahim.
El Valle de las Ballenas, 150 kilómetros al sur de El Cairo, fue descubierto en 1936 y está considerado como la reserva más valiosa de la evolución de ese mamífero de su etapa terrestre a la marina. El ministro consejero de la Embajada de Bélgica en El Cairo, Ivan Feyn, confirmó el incidente, aunque afirmó a Efe que su legación "cree que los dos vehículos de los diplomáticos no han causado ningún daño".
El incidente ha sido comunicado a la Fiscalía y al Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio, que a su vez han emprendido una investigación del suceso. La Fiscalía ha pedido la creación de un comité para que valore los daños causados. "Estamos esperando el resultado de las investigaciones del Ministerio de Asuntos Exteriores", explicó Feyn, quien agregó que "es muy pronto" para hablar de la reacción de la embajada en el caso de que se adopte alguna medida contra los diplomáticos. Según el ministro consejero belga, los dos vehículos, que llevaban matrícula diplomática, entraron en el valle sin saber que está prohibido, ya que no hubo ningún cartel ni ninguna persona que les prohibiera la entrada en la zona protegida. Sin embargo, Feyn insistió en que los diplomáticos viajaron por la pista para vehículos y en ningún momento salieron con sus coches fuera de esta vía. Según el Ministerio de Medio Ambiente, alrededor de 25.000 personas al año visitan el Valle de las Ballenas (o "Wadi El Hitan", en árabe), que fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO en 2005.