El buzo que murió en Gijón trabajaba con equipamiento ilegal, denuncia su sindicato
La asociación de buceo profesional acusa a la Capitanía Marítima de autorizar que los armadores suministren sistemas de inmersión inseguros
Daniel Álvarez Heres, el buzo gozoniego que falleció el pasado sábado mientras recogía ocle frente a las costas gijonesas, estaba trabajando sin el equipo de seguridad que exige la normativa, a pesar de que la Capitanía Marítima de Gijón autorizó al pesquero en que faenaba, el «Biempica Tres», a salir a la mar. «A todas luces, los equipos que usaban los buzos eran absolutamente ilegales», señaló ayer el delegado del Sindicato de Buzos Profesionales de España, Luis Torcida.
El buceador fallecido estaba trabajando a siete metros de profundidad, a dos millas al nordeste de El Musel. Recibía aire desde la superficie, a través de una manguera enganchada a un regulador (boquilla) por el que el buzo respiraba. El buzo no tenía comunicación con la superficie, más allá de los tirones que desde arriba daban a la manguera para indicarle que saliera.
Según el sindicato, este sistema contraviene la orden del 14 de octubre de 1997 del Ministerio de Fomento que establece las normas de seguridad para el ejercicio de actividades subacuáticas. La citada normativa establece que en los trabajos con alimentación de aire desde la superficie el buzo debe llevar una máscara facial o un casco (no un simple regulador), que estará conectado a una manguera principal de suministro de aire, otra de reserva enrollada en torno a la primera y un cable de comunicaciones para poder hablar con el barco, por ejemplo, para pedir auxilio.
La norma también señala que el equipo de buceo debe contar con un buceador de socorro, ayudantes que controlen el umbilicar que une a los buzos a superficie y un jefe de equipo. En este caso, trabajaban los buzos solos, distanciados unos de otros. Fue la tripulación del pesquero la que dando tirones a su manguera llamó a un compañero de Daniel Álvarez para que saliera a la superficie. Allí le indicó que volviera a bajar para ver qué le había ocurrido al joven gozoniego, que no daba señales. Se lo encontró fondeado.
Desde la Capitanía Marítima de Gijón evitaron ayer hacer comentarios, limitándose a señalar que en este caso se ha «cumplido con la ley escrupulosamente, como siempre».
Asturias es la única costa de España, junto a Cantabria y el País Vasco, en la que el ocle lo recogen buzos durante los meses de verano. Según profesionales de este trabajo, que prefieren no identificarse para evitar represalias laborales, ninguno de los barcos que están actualmente recogiendo ocle en Asturias cuenta con equipos de buceo que cumplan la normativa de Fomento, a pesar de lo que obtienen la autorización administrativa para salir a la mar. Los equipos técnicos y humanos que exige la normativa tendrían un coste sensiblemente mayor para los armadores.
El armador del «Biempica Tres», Marino Díaz, que ayer se encontraba trabajando en Perú, declinó cualquier responsabilidad en el accidente mortal: «La Capitanía Marítima dio de paso el barco, que mañana (por hoy) vuelve a salir a la mar llevando lo mismo», indicó el empresario, que agregó que «quien me tiene que decir si los equipos son o no legales es la Capitanía Marítima, no un sindicato». El armador alquiló el barco a una persona de Luanco, «que es quien contrató a los buzos, les paga y quien peritó los equipos con Capitanía».
La elevada mortalidad de buzos en accidentes laborales motivó ayer una reunión en el Ministerio de Fomento entre responsables del Sindicato de Buzos Profesionales y de la patronal con la directora general de la Marina Mercante, Isabel Durantes. El buzo gozoniego es el sexto que fallece en España en lo que va de año de un colectivo profesional de unas 600 personas.
Torcida indicó que en el Ministerio están dispuestos a actualizar la normativa sobre seguridad en el buceo, pero el sindicalista les insistió en que el principal problema es que se cumpla. Según el sindicato, Marina Mercante desvió responsabilidades hacia el Ministerio de Industria y el Ministerio de Trabajo. Un portavoz del Ministerio de Fomento consultado ayer por este periódico señaló que la responsabilidad de las inspecciones de los equipos de buceo corresponde a las comunidades autónomas.
Pese a las explicaciones sobre la falta de coordinación entre ministerios o sobre las competencias inspectoras del Principado, según los profesionales del buceo, la orden del Ministerio de Fomento que regula la seguridad en las actividades subacuáticas establece claramente que la autorización final compete a las capitanías marítimas, que de hecho autorizan.
http://www.lne.es/
Re: El buzo que murió en Gijón trabajaba con equipamiento ilegal, denuncia su sindicato
De verdad,que triste pais bananero el mio...pasa lo de siempre..."la culpa no es mia"...Si la capitania da de paso el barco,que pague las consecuencias con toda la ley por homicidio por imprudencia.Que hagan YA ,una ley,y si hay que poner hasta la marca de equipo a usar ,que se ponga,y el que salga de ahi....CARCEL.Que es lo que hace falta ya aqui...
Re: El buzo que murió en Gijón trabajaba con equipamiento ilegal, denuncia su sindicato
toda persona que sabia los equipos que tenia la embarcación para realizar ese tipo de trabajo y sabiendo que quien hace el trabajo esta arriesgando su vida no necesita que nadie le diga que equipos de seguridad debe utilizar, si haces ese trabajo deberias saberlo tu. pero es mas facil arriesgar la vida de un trabajador a gastar en equipos en condiciones. si no sabes lo que tienes que utilizar para hacer dicho trabajo no lo hagas y no pongas en riesgo la vida de nadie que solo quiere trabajar para vivir dignamente. culpables todos pero la empresa los primeros. hijos de .......