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Ver la versión completa : Origenes de la medicina hiperbárica



jaribas
1st November 2008, 07:16
"Cualquier tecnología suficientemente
desarrollada es indistinguible de la magia"

Arthur C. Clarke


Antes de coger la levita, silencioso testigo de una ardua noche de trabajo, el hombre asomó a la ventana para observar el clarear del nuevo día y escuchar la lejana serenata de los pájaro otoñales. La semipenumbra de la estancia no podía ocultar la luz de su euforia. Aquel otro experimento seguía mostrando la utilidad del oxígeno, un agente terapeútico familiar y muy cercano pero sin una definición clara de sus efectos hasta la fecha...


Experiencia CCCCLII. 15 de julio de 1874

Vino rosado en dos botellas de vidrio herméticas, ambas con tapones perforados

Botella A. Sometida a la presión de una atmósfera
Botella B. Sometida a 10 atmósferas de presión

29 de julio. Descompresión

Botella A. No ha cambiado de aspecto.Buen sabor, bouquet bastante fino
Botella B. Tiene un color viólaceo, con un precipitado coloreado y abundante, adherente al cristal. Descolorida, ha perdido el bouquet.

Con esta experiencia Paul Bert comprobaba como los procesos oxidativos naturales quedaban afectados por la presión. El vino es una sustancia al que el O2 a presión afectaba desfavorablemente.

El investigador había logrado reproducir en su propio laboratorio con esta experiencia - y otras muchas - las condiciones de vida que tán solo animales y vegetales acuáticos toleraban al soportar presiones que pueden cifrarse a las profundiades oceánicas, en centenares de atmosferas pues la naturaleza no ofrecía condiciones donde los seres vivos aéreos estuviesen sometidos a la influencia de una presión más elevada que la que ejerce la átmosfera a nivel de los mares.



LOS ORÍGENES

A partir del siglo XVI una industria en progreso urgía trabajar bajo presiones que pasaban las 4 atmósferas con los consiguientes y desconocidos peligros que acarreaba, pero hasta 1830 las primeras cámaras hiperbáricas fabricadas no fueron destinadas a tratar las enfermedades derivadas de la presión sufridas por los trabajadores que respiraban aire comprimido.

Aunque la utilización terapeútica del aire comprimido abarca alrededor de los últimos 160 años, los primeros precedentes hay que situarlos hacia el año 1662 cuando un médico británico, N. Henshaw, iniciaba sus pinitos en el tratamiento con aire a presión. En 1775 Priestley descubría el oxígeno y daba con una de las claves para abrir puertas a nuevos conocimientos sobre el etéreo elemento que era el aire y sus poderes curativos.

Así describía en 1835 el Dr M.Junod las primeras observaciones sobre el efecto del aire comprimido: "La membrana del tímpano se hunde hacia el oído interno y es incómodo, la respiración adquiere una nueva facilidad y parece aumentar la capacidad de los pulmones, se siente un calor agradable en el torax...". Otro médico, el Dr. Pravaz realizó a su vez diversas observaciones sobre la ralentización (disminución) del pulso.

En 1834 Paul Bert confirmó la teoría de la recompresión como prevención y tratamiento del ataque de presión.

Hacia 1850 la Medicina Hiperbárica experimenta una expansión en Europa. La gente de la época, alegre y confiada con una ciencia que no rehuía los retos más desafiantes, usaba los "baños de aire" ("aeroterapia") a la manera de la hidroterapia de los balnearios. Hacia finales del siglo XIX existían establecimientos hiperbáricos en París, Lyon, Montpellier, Niza, Escocia, Alemania, Milán, Suecia, Dinamarca, si bien su número no era elevado y los razonamientos que amparaban la moderna -en aquel tiempo- disciplina médica no estaban todavía sustentados en fuertes bases experimentales. Con todo, se sabía que la hiperbaria tenía efectos "tónicos y sedativos" en enfermedades como el asma enfisematosa, las bronquitis crónicas, las anemias y algunas hemorragias.

En 1875 El Dr. Fornanini trataba la tuberculosis produciendo un neumotórax terapeútico. Al igual que otras muchas veces ocurre en la historia de la humanidad, todo un torrente de esperanzas quedaba depositado en la entonces moderna Medicina Hiperbárica, y muestra de ello es la construcción en 1927 en Ohio de una cámara hiperbárica de 20 metros de diámetro, esférica, con 6 plantas en su interior, y un total de 72 habitaciones confortables, a modo de hotel.

Y de los románticos tiempos del siglo pasado llegamos a 1960 y 1961, años en que Boerema y Brummmelkamp consolidan la utilidad terapeútica de la Medicina hiperbárica con incontestables experimentaciones, siendo entonces cuando la medicina hiperbárica es admitida en el regazo del consenso científico internacional.

Hoy en USA hay más de 200 centros. En España existen alrededor de 50 centros, mayormente localizados en las areas costeras. La 1 cámara existente estuvo localizada en Porto Pi, hacia el año 1923, importada de Gran Bretaña, y el pionero de su utilizacion en nuestro país fué el Dr Antonio de Lara Muñoz, actualmente en activo en el Departamento de Medicina Hiperbárica del Hospital de la Caridad de Cartagena.



¿QUE ES LA MEDICINA HIPERBARICA?

La Medicina Hiperbárica (que en adelante llamaremos MH) es el tratamiento de diferentes enfermedades con el uso de aire u oxígeno administrado en un ambiente presurizado. La herramienta más empleada es el oxígeno, por lo que se denomina genéricamente OXIGENOTERAPIA.

El oxígeno es proporcionado al paciente por medio de una mascarilla que debe ajustarse herméticamente a la cara o mediante un capuchón ajustado al cuello. La presurización del interior de la cámara se hace con aire, por lo que para hacer penetrar el oxígeno en su interior deberá estar a igual presión que el aire, de ahí su nombre OXIGENOTERAPIA HIPERBARICA (OHB)