jaribas
3rd September 2007, 18:20
Abiertos 17 expedientes este año por pesca ilegal en la Reserva Marina
Cuatro turistas son sorprendidos en Formentera durante el fin de semana realizando actividades ilegales en aguas protegidas. El servicio de vigilancia de la Reserva cuenta con tres trabajadores y una embarcación FORMENTERA
PABLO RIVAS La Reserva Marina de Eivissa y Formentera ha realizado 17 denuncias por pesca submarina en aguas protegidas durante lo que llevamos de año, una de ellas por pesca con botella de aire y arpón, una actividad ilegal en todo el país.
Durante este fin de semana cuatro personas han sido denunciadas por realizar actividades ilegales en aguas de Formentera. El pasado sábado 11 a las 13,30 horas los vigilantes sorprendieron a dos ciudadanos italianos realizando pesca submarina con botella y arpón en la zona de Punta Prima. Los trabajadores se acercaron al lugar en el que los turistas buceaban, lanzándose en apnea (modalidad de buceo a pulmón) para verificar que efectivamente se estaba realizando la actividad ilegal. Este es un método habitual entre los empleados de la Reserva para conseguir sorprender a los pescadores in fraganti. Acto seguido, avisaron al Grupo Especial de Actividades Submarinas de la Guardia Civil (GEAS), que se presentó en el lugar de los hechos.
Los turistas, propietarios del velero `Berenice´, tenían en su poder dos capturas. Una de ellas fue soltada antes de que los vigilantes pudieran retenerla, pero la otra, un mero de 60 centímetros de longitud, fue requisada. Además, los GEAS incautaron aparatos de pesca, un equipo completo de buceo autónomo con ordenador, focos y dos arpones, uno de aire comprimido y otro de goma.
La conselleria de Agricultura y Pesca denunciaba a los individuos por delito medioambiental mientras la Guardia Civil cursaba otra por su parte. En opinión de los trabajadores «eran gente que habitualmente se dedica a esto, porque tenían un arpón de aire comprimido, un instrumento muy utilizado para pesca con botella porque tienen mucha potencia a poca distancia. Como las capturas que suelen coger son peces que están acostumbrados a los buceadores no necesitan arpones de largo alcance, que además son muy fáciles de transportar». Las multas por este tipo de pesca podrían ascender a 60.000 euros.
Por otra parte, el domingo 12 dos turistas mallorquines fueron sorprendidos en la misma zona realizando pesca submarina a pulmón, actividad prohibida dentro de los límites de la Reserva. Los dos individuos habían conseguido capturas «muy por debajo de la talla legal», según declararon los vigilantes. Ambos fueron denunciados por parte de la conselleria.
El servicio de vigilancia de la Reserva cuenta con tres trabajadores y una embarcación semirígida para todo el espacio que comprende el Parque Natural de ses Salines. Fuentes de la consellería de Agricultura y Pesca del Govern balear, organismo del que depende la Reserva, apuntan que «estos medios podrían ser insuficientes pero lo importante es concienciar a la gente». Aseguran que «en cualquier caso, frente a 1.000 barcos los medios siempre serán insuficientes. Se trata de un problema de cultura».
Fuente: http://www.diariodeibiza.es
Cuatro turistas son sorprendidos en Formentera durante el fin de semana realizando actividades ilegales en aguas protegidas. El servicio de vigilancia de la Reserva cuenta con tres trabajadores y una embarcación FORMENTERA
PABLO RIVAS La Reserva Marina de Eivissa y Formentera ha realizado 17 denuncias por pesca submarina en aguas protegidas durante lo que llevamos de año, una de ellas por pesca con botella de aire y arpón, una actividad ilegal en todo el país.
Durante este fin de semana cuatro personas han sido denunciadas por realizar actividades ilegales en aguas de Formentera. El pasado sábado 11 a las 13,30 horas los vigilantes sorprendieron a dos ciudadanos italianos realizando pesca submarina con botella y arpón en la zona de Punta Prima. Los trabajadores se acercaron al lugar en el que los turistas buceaban, lanzándose en apnea (modalidad de buceo a pulmón) para verificar que efectivamente se estaba realizando la actividad ilegal. Este es un método habitual entre los empleados de la Reserva para conseguir sorprender a los pescadores in fraganti. Acto seguido, avisaron al Grupo Especial de Actividades Submarinas de la Guardia Civil (GEAS), que se presentó en el lugar de los hechos.
Los turistas, propietarios del velero `Berenice´, tenían en su poder dos capturas. Una de ellas fue soltada antes de que los vigilantes pudieran retenerla, pero la otra, un mero de 60 centímetros de longitud, fue requisada. Además, los GEAS incautaron aparatos de pesca, un equipo completo de buceo autónomo con ordenador, focos y dos arpones, uno de aire comprimido y otro de goma.
La conselleria de Agricultura y Pesca denunciaba a los individuos por delito medioambiental mientras la Guardia Civil cursaba otra por su parte. En opinión de los trabajadores «eran gente que habitualmente se dedica a esto, porque tenían un arpón de aire comprimido, un instrumento muy utilizado para pesca con botella porque tienen mucha potencia a poca distancia. Como las capturas que suelen coger son peces que están acostumbrados a los buceadores no necesitan arpones de largo alcance, que además son muy fáciles de transportar». Las multas por este tipo de pesca podrían ascender a 60.000 euros.
Por otra parte, el domingo 12 dos turistas mallorquines fueron sorprendidos en la misma zona realizando pesca submarina a pulmón, actividad prohibida dentro de los límites de la Reserva. Los dos individuos habían conseguido capturas «muy por debajo de la talla legal», según declararon los vigilantes. Ambos fueron denunciados por parte de la conselleria.
El servicio de vigilancia de la Reserva cuenta con tres trabajadores y una embarcación semirígida para todo el espacio que comprende el Parque Natural de ses Salines. Fuentes de la consellería de Agricultura y Pesca del Govern balear, organismo del que depende la Reserva, apuntan que «estos medios podrían ser insuficientes pero lo importante es concienciar a la gente». Aseguran que «en cualquier caso, frente a 1.000 barcos los medios siempre serán insuficientes. Se trata de un problema de cultura».
Fuente: http://www.diariodeibiza.es