The diving journalist
18th May 2011, 07:33
La consellería de Pesca dio autorización a los navalleiros para reducir la población de equinodermos
Una verdadera plaga de estrellas de mar amenaza los bancos de cultivo de berberecho y almeja de la ría de Arousa. "Nunca vi tantas como este año", explica Daniel Otero, un experimentado navalleiro y buceador en apnea que ayer participó en las labores de extracción del depredador equinodermo.
"Todas las piezas que sacamos se estaban engullendo una almeja cuando las capturamos", explica gráficamente y es que las estrellas de mar esquilman los bancos marisqueros con una gran voracidad.
Este año la situación podría asemejarse al de una plaga. De ahí que la Consellería de Mar acelerase el permiso para acometer este trabajo de limpieza manual del fondo marino.
Por ello ayer, desde las diez de la mañana a las doce y media, diez buceadores, en dos embarcaciones, saltaron al agua para sacar la máxima cantidad posible. En total, varios capachos, con alrededor de 300 kilos de estrellas, pues se cogían por docenas.
La limpieza se llevó a cabo bajo el puente de A Illa de Arousa en una superficie similar a la de un campo de fútbol, explica Daniel Otero, que se erigió en portavoz del grupo.
Son conscientes de que el tiempo empleado fue escaso, pero en dos horas y media han sacado cientos de estrellas, un animal marino que no tiene mejor utilización que el servir de abono pero que devora lo que encuentra, se come cualquier cosa que tenga un tamaño inferior al de sus brazos.
Y no son animales pequeños. Pueden medir entre 20 y 25 centímetros por lo que moluscos, peces y otros seres vivos marinos se encuentran entre sus preferencias.
En el caso de A Illa, el "plato" preferido son las almejas de las distintas concesiones, la mayor parte situadas en la zona de O Bao, a la entrada en el municipio arousano.
Las mariscadoras habían expresado su preocupación porque las zonas aparecían muy esquilmadas pues se han sumado numerosos inconvenientes en las últimas semanas, desde la multiplicación de estrellas al aumento de volumen de lo que ellas llaman "esterco" y que no es más que la "leituga de mar" o el "wakamen".
Todos estos condicionantes de la naturaleza, sumado también a la acción de los furtivos –que también existen–, estaban minorando de forma muy considerable las rentas de las mariscadoras, pero también los navalleiros ven en riesgo su futura campaña si sigue proliferando esta especie de asteroides.
Las navajas también son un fruto de mar apetecido por las estrellas y esta época es especialmente complicada debido a que es el momento de la reproducción. Están desovando y por ello se encuentran en veda desde la pasada Semana Santa.
Los navalleiros temen que las estrellas puedan acabar con esta especie si no se actúa con rapidez, frenando la plaga.
"No me atrevo a calificar la invasión de estrellas, pero si puedo decir que yo nunca vi tantas estrellas en mi vida como buceador", explica con preocupación Daniel Otero, consciente de que se trata de una especie muy depredadora.
"Tenemos que seguir limpiando la zona en nuestros días libres y lo hacemos de forma gratuita porque pueden acabar con todo lo que encuentren a su paso", señala.
La situación, lógicamente, es similar en otras zonas de la ría, aunque no se haya actuado hasta el momento.
http://www.farodevigo.es
Una verdadera plaga de estrellas de mar amenaza los bancos de cultivo de berberecho y almeja de la ría de Arousa. "Nunca vi tantas como este año", explica Daniel Otero, un experimentado navalleiro y buceador en apnea que ayer participó en las labores de extracción del depredador equinodermo.
"Todas las piezas que sacamos se estaban engullendo una almeja cuando las capturamos", explica gráficamente y es que las estrellas de mar esquilman los bancos marisqueros con una gran voracidad.
Este año la situación podría asemejarse al de una plaga. De ahí que la Consellería de Mar acelerase el permiso para acometer este trabajo de limpieza manual del fondo marino.
Por ello ayer, desde las diez de la mañana a las doce y media, diez buceadores, en dos embarcaciones, saltaron al agua para sacar la máxima cantidad posible. En total, varios capachos, con alrededor de 300 kilos de estrellas, pues se cogían por docenas.
La limpieza se llevó a cabo bajo el puente de A Illa de Arousa en una superficie similar a la de un campo de fútbol, explica Daniel Otero, que se erigió en portavoz del grupo.
Son conscientes de que el tiempo empleado fue escaso, pero en dos horas y media han sacado cientos de estrellas, un animal marino que no tiene mejor utilización que el servir de abono pero que devora lo que encuentra, se come cualquier cosa que tenga un tamaño inferior al de sus brazos.
Y no son animales pequeños. Pueden medir entre 20 y 25 centímetros por lo que moluscos, peces y otros seres vivos marinos se encuentran entre sus preferencias.
En el caso de A Illa, el "plato" preferido son las almejas de las distintas concesiones, la mayor parte situadas en la zona de O Bao, a la entrada en el municipio arousano.
Las mariscadoras habían expresado su preocupación porque las zonas aparecían muy esquilmadas pues se han sumado numerosos inconvenientes en las últimas semanas, desde la multiplicación de estrellas al aumento de volumen de lo que ellas llaman "esterco" y que no es más que la "leituga de mar" o el "wakamen".
Todos estos condicionantes de la naturaleza, sumado también a la acción de los furtivos –que también existen–, estaban minorando de forma muy considerable las rentas de las mariscadoras, pero también los navalleiros ven en riesgo su futura campaña si sigue proliferando esta especie de asteroides.
Las navajas también son un fruto de mar apetecido por las estrellas y esta época es especialmente complicada debido a que es el momento de la reproducción. Están desovando y por ello se encuentran en veda desde la pasada Semana Santa.
Los navalleiros temen que las estrellas puedan acabar con esta especie si no se actúa con rapidez, frenando la plaga.
"No me atrevo a calificar la invasión de estrellas, pero si puedo decir que yo nunca vi tantas estrellas en mi vida como buceador", explica con preocupación Daniel Otero, consciente de que se trata de una especie muy depredadora.
"Tenemos que seguir limpiando la zona en nuestros días libres y lo hacemos de forma gratuita porque pueden acabar con todo lo que encuentren a su paso", señala.
La situación, lógicamente, es similar en otras zonas de la ría, aunque no se haya actuado hasta el momento.
http://www.farodevigo.es