The diving journalist
17th May 2011, 07:30
Emerge de una cueva situada bajo una montaña
El manantial es sin duda la sima de agua dulce más profunda del planeta
Gracias a las redes sociales, cada día contamos con más información sobre el universo que nos rodea: observadores astronómicos que revelan sus hallazgos en tiempo real, sondas espaciales que nos traen las más bellas imágenes de nuestra galaxia, sesudas investigaciones que arrojan luz sobre nuestros orígenes.
Como explica el diario ABC (http://www.abc.es/20110510/medios-redes/abci-neozelandes-201105101442.html), sin ir más lejos, la NASA (http://www.nasa.gov/) presentaba hace unos meses el mapa lunar más detallado de cuantos conocemos hasta la fecha, un mosaico compuesto por más de dos mil millones de imágenes tomadas por el LRO -Lunar Reconnaissance Orbiter (http://lunar.gsfc.nasa.gov/)-.
Pero en el esfuerzo del hombre por conocer su entorno no todo son conquistas y parabienes, también hay grandes batallas aún no libradas.
Así, al tiempo que crece significativamente la información disponible sobre el exterior, hay zonas de nuestro planeta que continúan inexploradas; y todos los años son descubiertas nuevas especies animales, de las que a menudo damos noticia desde este espacio.
Lagunas de conocimiento; o mares, o ríos, como el que hoy nos ocupa, al sur de Nueva Zelanda.
El blog Omicrono (http://www.omicrono.com/) se hace eco de la investigación que está llevando a cabo un grupo de científicos de National Geographic (http://www.nationalgeographic.com.es/)para desvelar el origen de un curioso río neozelandés que emerge de una cueva situada bajo una montaña; probablemente, la cueva de agua dulce más profunda del planeta.
Un equipo de 5 buceadores australianos de National Geographic ha decidido bajar a explorar la cueva para desvelar el misterio del río sin origen.
La dificultad de la misión del equipo es extrema, descender por aguas heladas a tal profundidad hace que el retorno a la superficie sea muy peligroso debido a la enfermedad de los buceadores conocida como "the bends", que podría producir incluso la muerte.
Al enfrentarse a una inmersión de horas, no sólo tienen que bajar con bombonas de oxígeno auxiliares, sino que además construyen unas especie de cápsulas que les permiten hacer paradas durante el descenso para refugiarse del agua helada, beber un poco y "tomar el aire".
Pese a batir el récord de descenso de submarinismo en agua dulce, el equipo no logró encontrar el origen del misterioso río, y debido en parte a problemas del experimentado buceador Craig Challen con la respiración, tuvieron que regresar a la superficie.
El misterio sigue en pié, y el equipo tiene pensado volver el año que viene a intentar una nueva inmersión en la cueva.
Hasta su resolución, tendremos que conformarnos con el 'making of' de esta gesta sideral librada bajo nuestros pies. Más allá: más acá. Acaso la misma cosa.
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http://www.periodistadigital.com
El manantial es sin duda la sima de agua dulce más profunda del planeta
Gracias a las redes sociales, cada día contamos con más información sobre el universo que nos rodea: observadores astronómicos que revelan sus hallazgos en tiempo real, sondas espaciales que nos traen las más bellas imágenes de nuestra galaxia, sesudas investigaciones que arrojan luz sobre nuestros orígenes.
Como explica el diario ABC (http://www.abc.es/20110510/medios-redes/abci-neozelandes-201105101442.html), sin ir más lejos, la NASA (http://www.nasa.gov/) presentaba hace unos meses el mapa lunar más detallado de cuantos conocemos hasta la fecha, un mosaico compuesto por más de dos mil millones de imágenes tomadas por el LRO -Lunar Reconnaissance Orbiter (http://lunar.gsfc.nasa.gov/)-.
Pero en el esfuerzo del hombre por conocer su entorno no todo son conquistas y parabienes, también hay grandes batallas aún no libradas.
Así, al tiempo que crece significativamente la información disponible sobre el exterior, hay zonas de nuestro planeta que continúan inexploradas; y todos los años son descubiertas nuevas especies animales, de las que a menudo damos noticia desde este espacio.
Lagunas de conocimiento; o mares, o ríos, como el que hoy nos ocupa, al sur de Nueva Zelanda.
El blog Omicrono (http://www.omicrono.com/) se hace eco de la investigación que está llevando a cabo un grupo de científicos de National Geographic (http://www.nationalgeographic.com.es/)para desvelar el origen de un curioso río neozelandés que emerge de una cueva situada bajo una montaña; probablemente, la cueva de agua dulce más profunda del planeta.
Un equipo de 5 buceadores australianos de National Geographic ha decidido bajar a explorar la cueva para desvelar el misterio del río sin origen.
La dificultad de la misión del equipo es extrema, descender por aguas heladas a tal profundidad hace que el retorno a la superficie sea muy peligroso debido a la enfermedad de los buceadores conocida como "the bends", que podría producir incluso la muerte.
Al enfrentarse a una inmersión de horas, no sólo tienen que bajar con bombonas de oxígeno auxiliares, sino que además construyen unas especie de cápsulas que les permiten hacer paradas durante el descenso para refugiarse del agua helada, beber un poco y "tomar el aire".
Pese a batir el récord de descenso de submarinismo en agua dulce, el equipo no logró encontrar el origen del misterioso río, y debido en parte a problemas del experimentado buceador Craig Challen con la respiración, tuvieron que regresar a la superficie.
El misterio sigue en pié, y el equipo tiene pensado volver el año que viene a intentar una nueva inmersión en la cueva.
Hasta su resolución, tendremos que conformarnos con el 'making of' de esta gesta sideral librada bajo nuestros pies. Más allá: más acá. Acaso la misma cosa.
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