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Ver la versión completa : Sandra Escobar, la caleña que 'respira' bajo el agua



The diving journalist
5th February 2011, 09:17
Con 4 minutos y 57 segundos, logró primer lugar en apnea estática entre 5 países.

"Fueron segundos de mi vida los que se perdieron. Me 'zambié' y no supe qué pasó en esos momentos".


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Así recuerda Sandra Liliana Escobar el incidente que sufrió hace tres meses en una competencia de apnea, modalidad de natación subacuática, no exenta de riesgos.
'Zambiarse' es el término que hace relación a las convulsiones que por la falta de oxígeno sufren quienes participan en esta disciplina de natación bajo el agua, sin equipos, con solo los pulmones para 'aguantar' al máximo.
A los 6 años aprendió a nadar y desde entonces no deja de hacerlo, pero fue a los 15 cuando empezó a competir. Después de 23 años en diversos estilos, hace dos se especializa en las actividades subacuáticas.
Esta comunicadora social de la Universidad del Valle entrena dos horas diarias en las noches.
Para 'calentar y estirar pulmones' camina 100 metros con la respiración contenida o hace sesiones de 45 segundos de apnea negativa -expulsando previamente todo el aire- y otras de positiva -tomándolo y reteniéndolo al máximo- en sesiones de minuto y medio.
También hace más de tres kilómetros de natación estilo libre para resistencia física.
Ese entrenamiento le permitió 'aguantar bajo el agua' cuatro minutos y 57 segundos, logrando el primer lugar en apnea estática en Cuba. Además de Colombia y el equipo anfitrión, participaron México, Ecuador y Venezuela.
Esa ocasión venció la ansiedad de salir a tomar aire recordando el multicolor paisaje submarino de San Andrés.
"Normalmente lo que hago es contar los latidos del corazón, lo hago en sesiones de 60, así me concentro en mi propio organismo, pero todo es el resultado de un entrenamiento permanente, en los ejercicios de respiración", dice.
No fue fácil en esta modalidad que desafía las mismas leyes de la fisiología y la medicina, que advierte de los riesgos para quien permanezca cinco minutos o más sin recibir oxigeno(ver recuadro).
Por eso, en competencia siempre hay alguien atento a alguna convulsión, que es la reacción del cuerpo cuando los músculos se contraen pidiendo oxígeno.
A la pérdida de conciencia se le llama 'Black Up', o 'negro afuera', no como expresión racista sino por el tono de piel que se adquiere con la práctica de natación.
En apnea estática, los únicos elementos adicionales permitidos son las gafas protectoras y un collarín de plomo en el cuello, de más de dos kilos, que ayuda a permanecer bajo el agua. Otros utilizan el equipo de buceo o 'lastre'.
Otra modalidad es la dinámica con monoaletas -una especie de 'cola' en los pies, de 56 cms. de largo por 46 de ancho, en carbono o fibra de vidrio- para mayor recorrido.
La delegación colombiana en Cuba la complementaban Angie Jurado Penagos, estudiante de medicina en Univalle; el arquitecto Andrés Tenorio y Néstor Tenjo, que fueron segundo lugar por equipos.
Los cuatro hacen parte de la selección nacional de actividades subacuáticas. Andrés lleva 20 años en natación, dos de ellos en apnea, los mismos de Angie. Ellos se preparan intensamente para el internacional de Cali del próximo año.
Carlos Alberto Vásquez, el entrenador y vicepresidente de actividades subacuáticas del Valle, dice que las bases en apnea estática son el control de la respiración, relajación mental y evitar al máximo todo movimiento para no consumir energía ni 'quemar' oxígeno.
En estática es tal la concentración y el momento que se vive que Sandra no ha repetido ese registro de Cuba.
Apnea, un reto para la fisiología
La medicina enseña que más de cinco minutos sin oxígeno ocasionan daños cerebrales.
El apneista checo Martín Stepaneck consiguió 8 minutos 6 segundos.
Hay otro registro de 13:42, 'tomando' antes oxígeno. En apnea dinámica sin aletas el australiano Herbert Nisch hizo 134 metros y la francesa Nathalie Desreac 95. Ellos tienen los registros con aletas, 181 y 150 metros.
La apnea tiene relación con el buceo deportivo, del que un estudio del Japón señala que una hora de práctica tiene entre 32 y 64 veces más riesgo que conducir.
Perforación de tímpanos, pulmonía, hipotermia, hemorragia nasal y muerte, riesgos en profundidad. Para seguridad ahora hay trajes para mantener la temperatura, gafas y protectores de oídos, siempre y cuando se tenga el debido entrenamiento.