hombre pez
10th March 2010, 14:06
Viernes 13:30.
Por fin esperando a coger el ferry para cruzar la bahía de la ciudad de Maputo (antiguamente Lourenço Marques), formada por la confluencia de los ríos Usutu, Pongola y del rio Maputo, del cual copió el nombre la ciudad.
Durante la espera, la cual se realiza en plena vía publica (colas de coches estacionados en doble fila), se van alternando los vendedores ambulantes que se acercan al coche ofreciéndote sus variados productos desde máscaras talladas en madera hasta cacahuetes tostados, pasando por relojes de dudosa precedencia, capulanas (pareo o sharon con colores y motivos africanos), refrescos….etc
Por fin subimos a la cubierta del barco donde unos operarios te van indicando cómo hacer las maniobras con el coche para poder colocar 16 vehículos en la cubierta encajados como piezas de puzzle, mas los cientos de personas que embarcan a pie, a pie tienen que realizar el trayecto, algunas aprisionadas entre los coches. Por suerte es un trayecto corto de apenas 5 minutos, pero la labor de embarcar y luego desmontar el puzzle demora la cosa cerca de una hora.
Ya estamos en el pueblo de Catembe, al otro lado de la bahía, y de allí parte una penosa pista que durará unas 3 horas y que nada tiene que envidiar a una de las etapas de los primeros Paris - Dakar.
Nuestro destino es Punta de Ouro, preciosa bahía haciendo casi frontera con Sudáfrica.
Al llegar a Punta d’Ouru, lo primero fue buscar un centro de buceo en condiciones. Habíamos contactado con uno y no recibimos ninguna respuesta y como íbamos un grupo de 10 "megulhadores" (que casi llenamos un bote) queríamos concretar precios y saber a qué puntos de inmersión nos podían llevar y si podíamos escogerlos. En vista del interés mostrado, ninguno, decidimos buscarnos la vida y visitar a los 5 dive centres restantes. Una vez vistos todos nos decantamos por Scuba Adventures, poca gente y trato amable. Socio propietario mozambiqueño (aquí todo está en manos de sudafricanos) y jóvenes instructores-divemasters.
El sábado: como en el grupo no todos disponíamos de una titulación superior al OWD sólo nos fuimos a realizar la inmersión de las 7 de la mañana, Álvaro un amigo y compañero yo y mi buddy.
A PINNACLES fuimos: Es la inmersión que prefieren los que por allí pasan que son mayoritariamente boers sudafricanos porque es la más alejada de la costa (te cobran un suplemento, en verdad el trayecto dura 15/20 minutos) y la segunda en profundidad (41mtrs en mi ordenador). Dicen que allí hay bancos de barracudas y otros que atraen a abundantes tiburones.
Pues resultó ser la inmersión más aburrida de mi corta vida como buzo. No vimos nada de nada, ni una miserable sardina. Bueno, miento, al finalizar pudimos medio distinguir la sombra de un par de mantas diablo a lo lejos. La única diversión fue que había una corriente de tres pares de cojo… y nos llevó como a 800 metros del punto de entrada. Parecíamos torpedos a toda leche.
La segunda la realizamos a las 2 del medio día debido a que había gente del grupo que llegaba el mismo sábado y se demoraron en su llegada. Cosa que no extrañó a nadie, ya que si la mencionada pista ya es mala de por sí, la noche anterior estuvo lloviendo y empeorando aún más las penosas condiciones de la misma.
Cuando ya todo y todos estuvieron listos nos dirigimos a PARADISE y menuda diferencia con la anterior inmersión.
La inmersión se realiza en un arrecife rocoso de poca profundidad (18mts en mi ordenador), donde abunda el coral y la típica fauna que en él habita. Tuvimos una magnifica visibilidad con una ligera y agradable corriente que nos acompañó, pero hubo alguno que le pareció excesiva.
Fue un broche de oro para casi todos, lástima que mi buddy y yo hemos entrado en este mudo de SENSACIONES por la puerta grande de Malasia y sí que nos gustó pero no fue para tanto.
El domingo, la mar se levantó agitada y pedimos ir todos juntos a DOODLES. Serían las 9 de la mañana. La noche anterior nos acostamos tarde y no hubo manera de hacer la primera de las 7 de la mañana. Aunque hablando con otro grupo que sí la hicieron, no nos perdimos nada. La corriente no les dejó entrar en unas “cuevas”(creo que hablan de un lugar donde las rocas forman túneles y pequeños agujeros, hay que investigas esa inmersión) donde era la inmersión.
Problemas tuvimos para cruzar la línea de la rompiente, que sólo gracias a la habilidad del que manejaba el bote pudimos franquear al cuarto intento ya que cada vez una enorme ola obligaba al botero a virar en 180 grados y salir pitando o se nos tragaba enteritos.
La inmersión DOODLES, son formaciones rocosas planas en un fondo de arena (17,8mts en mi ordenador). Había una fortísima corriente de vaivén. A mi buddy y a un servidor eso les da muy buenas SENSACIONES y gusta más que una pirueta a un niño. Pudimos disfrutar de lo lindo. Sólo al descender ya casi nos posamos encima de una tortuga de un tamaño espectacular y pudimos contemplar una infinidad de vida, labios dulces, peces ángel, mariposa, soldados, león, ratas y…. también un par de meros patata, uno de un tamaño asombroso.
Bueno, se terminó y ahora toca recoger todo, comer bien y enfrentarse a esa maldita pista de vuelta, la cual nos dio una sorpresa. Hay en un tramo que atraviesa una reserva natural y allí la cruzó un enorme elefante africano justo por delante de nuestro coche.
Lo peor y más nefasto: Con las prisas de dejar las cosas para última hora se quedó la cámara en casa, otra vez será.
Lo que no entiendo es que esta vez como bajamos con el traje de 3mm (el agua estaba a 28º) y con 3 Kg. iba sobre lastrado y con el maldito de 5,4mm no hay manera de hundirme y necesito ponerme 6kg que mi espalda se resiente de llevar tanto peso.
Un fin de semana lleno de SENSACIONES
HAPPY BUBBLES
Por fin esperando a coger el ferry para cruzar la bahía de la ciudad de Maputo (antiguamente Lourenço Marques), formada por la confluencia de los ríos Usutu, Pongola y del rio Maputo, del cual copió el nombre la ciudad.
Durante la espera, la cual se realiza en plena vía publica (colas de coches estacionados en doble fila), se van alternando los vendedores ambulantes que se acercan al coche ofreciéndote sus variados productos desde máscaras talladas en madera hasta cacahuetes tostados, pasando por relojes de dudosa precedencia, capulanas (pareo o sharon con colores y motivos africanos), refrescos….etc
Por fin subimos a la cubierta del barco donde unos operarios te van indicando cómo hacer las maniobras con el coche para poder colocar 16 vehículos en la cubierta encajados como piezas de puzzle, mas los cientos de personas que embarcan a pie, a pie tienen que realizar el trayecto, algunas aprisionadas entre los coches. Por suerte es un trayecto corto de apenas 5 minutos, pero la labor de embarcar y luego desmontar el puzzle demora la cosa cerca de una hora.
Ya estamos en el pueblo de Catembe, al otro lado de la bahía, y de allí parte una penosa pista que durará unas 3 horas y que nada tiene que envidiar a una de las etapas de los primeros Paris - Dakar.
Nuestro destino es Punta de Ouro, preciosa bahía haciendo casi frontera con Sudáfrica.
Al llegar a Punta d’Ouru, lo primero fue buscar un centro de buceo en condiciones. Habíamos contactado con uno y no recibimos ninguna respuesta y como íbamos un grupo de 10 "megulhadores" (que casi llenamos un bote) queríamos concretar precios y saber a qué puntos de inmersión nos podían llevar y si podíamos escogerlos. En vista del interés mostrado, ninguno, decidimos buscarnos la vida y visitar a los 5 dive centres restantes. Una vez vistos todos nos decantamos por Scuba Adventures, poca gente y trato amable. Socio propietario mozambiqueño (aquí todo está en manos de sudafricanos) y jóvenes instructores-divemasters.
El sábado: como en el grupo no todos disponíamos de una titulación superior al OWD sólo nos fuimos a realizar la inmersión de las 7 de la mañana, Álvaro un amigo y compañero yo y mi buddy.
A PINNACLES fuimos: Es la inmersión que prefieren los que por allí pasan que son mayoritariamente boers sudafricanos porque es la más alejada de la costa (te cobran un suplemento, en verdad el trayecto dura 15/20 minutos) y la segunda en profundidad (41mtrs en mi ordenador). Dicen que allí hay bancos de barracudas y otros que atraen a abundantes tiburones.
Pues resultó ser la inmersión más aburrida de mi corta vida como buzo. No vimos nada de nada, ni una miserable sardina. Bueno, miento, al finalizar pudimos medio distinguir la sombra de un par de mantas diablo a lo lejos. La única diversión fue que había una corriente de tres pares de cojo… y nos llevó como a 800 metros del punto de entrada. Parecíamos torpedos a toda leche.
La segunda la realizamos a las 2 del medio día debido a que había gente del grupo que llegaba el mismo sábado y se demoraron en su llegada. Cosa que no extrañó a nadie, ya que si la mencionada pista ya es mala de por sí, la noche anterior estuvo lloviendo y empeorando aún más las penosas condiciones de la misma.
Cuando ya todo y todos estuvieron listos nos dirigimos a PARADISE y menuda diferencia con la anterior inmersión.
La inmersión se realiza en un arrecife rocoso de poca profundidad (18mts en mi ordenador), donde abunda el coral y la típica fauna que en él habita. Tuvimos una magnifica visibilidad con una ligera y agradable corriente que nos acompañó, pero hubo alguno que le pareció excesiva.
Fue un broche de oro para casi todos, lástima que mi buddy y yo hemos entrado en este mudo de SENSACIONES por la puerta grande de Malasia y sí que nos gustó pero no fue para tanto.
El domingo, la mar se levantó agitada y pedimos ir todos juntos a DOODLES. Serían las 9 de la mañana. La noche anterior nos acostamos tarde y no hubo manera de hacer la primera de las 7 de la mañana. Aunque hablando con otro grupo que sí la hicieron, no nos perdimos nada. La corriente no les dejó entrar en unas “cuevas”(creo que hablan de un lugar donde las rocas forman túneles y pequeños agujeros, hay que investigas esa inmersión) donde era la inmersión.
Problemas tuvimos para cruzar la línea de la rompiente, que sólo gracias a la habilidad del que manejaba el bote pudimos franquear al cuarto intento ya que cada vez una enorme ola obligaba al botero a virar en 180 grados y salir pitando o se nos tragaba enteritos.
La inmersión DOODLES, son formaciones rocosas planas en un fondo de arena (17,8mts en mi ordenador). Había una fortísima corriente de vaivén. A mi buddy y a un servidor eso les da muy buenas SENSACIONES y gusta más que una pirueta a un niño. Pudimos disfrutar de lo lindo. Sólo al descender ya casi nos posamos encima de una tortuga de un tamaño espectacular y pudimos contemplar una infinidad de vida, labios dulces, peces ángel, mariposa, soldados, león, ratas y…. también un par de meros patata, uno de un tamaño asombroso.
Bueno, se terminó y ahora toca recoger todo, comer bien y enfrentarse a esa maldita pista de vuelta, la cual nos dio una sorpresa. Hay en un tramo que atraviesa una reserva natural y allí la cruzó un enorme elefante africano justo por delante de nuestro coche.
Lo peor y más nefasto: Con las prisas de dejar las cosas para última hora se quedó la cámara en casa, otra vez será.
Lo que no entiendo es que esta vez como bajamos con el traje de 3mm (el agua estaba a 28º) y con 3 Kg. iba sobre lastrado y con el maldito de 5,4mm no hay manera de hundirme y necesito ponerme 6kg que mi espalda se resiente de llevar tanto peso.
Un fin de semana lleno de SENSACIONES
HAPPY BUBBLES